tag:blogger.com,1999:blog-23899227374591135782023-11-16T17:37:51.987+01:00En fin...Noéhttp://www.blogger.com/profile/01510460993976112884noreply@blogger.comBlogger130125tag:blogger.com,1999:blog-2389922737459113578.post-79798857069868903092019-05-21T19:03:00.001+02:002020-05-04T00:50:18.481+02:00Patagonia. Día 5.<div>
En Argentina no saben hacer café. Desayunamos de nuevo con los
mexicanos ricos. Coincidir en este hotel ha sido un eclipse: ellos han
bajado sus estándares porque son quince y tienen que ir agarraditos de
la mano a todas partes, y nosotros hemos conseguido
una oferta. Ellos también vuelan a Ushuaia, pero no vamos a volver a
encontrarnos.</div>
<div>
Nos sube al aeropuerto la misma taxista a la que espantamos ayer por la noche (no es casualidad, trabaja con el hotel). Un cuarto de hora aguantando su conversación nos convence de que no hicimos mal en escapar de ella.<br />
<ul>
<li>Opina mucho de política: virulenta contra Macri, dice de Cristina que “hablan de corrupción... yo no sé nada de eso”.</li>
<li>Está en contra del aborto por plazos, y dice que "las feministas a veces se pasan".</li>
<li>Vende
muy bien a su hijo menor, que trabaja en alguna ciudad y gana bien,
vive solo y es soltero; habla menos, pero algo todavía, de la mayor. A
la del medio la menciona una vez, y no le acierta la edad a la primera.</li>
<li>Su
marido y ella se retiraron a Calafate hace seis años, después de haber
criado a los hijos. Se compró el taxi en Calafate. Es el primer trabajo que ha tenido.</li>
<li>En
general hace comentarios de taxista: tal o cual ciudad es muy insegura,
la gasolina está cara, el país va mal de una forma indefinida.</li>
<li>Le
comentamos que la excursión de kayak por el Perito Moreno nos ha
parecido cara. Nos contesta “no sé, yo nunca he dado ese servicio”.</li>
</ul>
Al llegar a Ushuaia, el señor del rent-a-car nos dice, con voz y formas de locutor de radio, que tenemos que esperar una hora
para poder recoger el coche. Tampoco vamos a poder hacer el check-in en el
hotel hasta dentro de dos horas. Vacaciones.</div>
<div>
Conducir en Ushuaia: muchos badenes, semáforos después de los
cruces, un coche circulando por la avenida tiene que cederle a uno que
entra desde una calle secundaria.</div>
<div>
Abrimos desde dentro del coche la puerta de atrás del lado del
conductor. No lo sabemos en el momento, pero ya no seremos capaces de
volver a cerrarla, y durante los siguientes cuatro días dejaremos el
coche siempre abierto.</div>
<div>
Al bajarnos del coche nos cruzamos con un perro negro, y pasea con nosotros durante 40 minutos sin que podamos
desprendernos de él. Le ponemos “Turba”. Ladra como
un loco a los coches en un cruce en concreto.</div>
<div>
Vemos un cruceiro gallego en una rotonda. La inscripción pone
“Galicia brila neste fin da terra”. Es del 96, me pregunto
si Fraga estuvo aquí.</div>
<div>
Cabañas de los 90. Cenefas de flores. Estufas de gas. Tapetes bajo jarrones con flores secas. El nuevo testamento en la mesilla.</div>
<div>
En contra de lo que habíamos previsto, no tiene lavadora, así que tendremos que repetir ropa.</div>
<div>
Menos bucólico de lo que esperábamos (hay vecinos), pero encontramos ocas y un conejo delante de la puerta.</div>
<div>
Vamos a los museos de la cárcel, pero sólo vemos dos de ellos (hay
unos 6), porque nos quedamos sin tiempo (nos apagan luces a nuestro alrededor
sin dirigirnos la palabra).</div>
<div>
Museo marítimo:</div>
<ul class="x_Apple-dash-list">
<li>Mucho más pequeño que el de la cárcel: solo son tres salas, en lo
que antes eran las duchas y los retretes de un ala. Y aún así Noé está
ahí 2h.</li>
<li>Maquetas hechas como hobby por un ingeniero civil, Miron Gonik.</li>
<li>Láminas explicativas y mapas escritos por el director del museo, el licenciado Carlos P. Vairo.</li>
<li>Paneles
explicativos de los 90, láminas con marcas hechas a mano con rotulador,
los mismos nombres (Gonik y Vairo) que se repiten una y otra vez. Tengo
una sensación parecida al museo de las ballenas de Husavik: me parece
modesto, artesanal, hecho por un
par de personas entusiastas, como tratando muy esforzadamente de
justificar su existencia.
</li>
<li>Sorprendentemente, en una esquina encuentro láminas originales de Edward Wilson!</li>
</ul>
<div>
Museo del presidio:</div>
<ul class="x_Apple-dash-list">
<li>Solo nos da tiempo a hacer la visita guiada. El guía declama. Juega con el ritmo y el fraseo para
mayor efectismo. Repite frases para darles peso (“pizarra, arcilla, y
agua... argamasa”). Anuncia sus movimientos (“voy a colocarme a su
izquierda, bajo la planta de la cárcel”, “voy a
descolgar esta fotografía, y la giraré de derecha a izquierda, para
mostrársela más de cerca”), y gesticula con las manos como un mago (“si
mi mano fuese la Isla de los Estados”)</li>
<li>La charla ensayada se hace demasiado larga. Muchas fechas, muy didáctica, pedante. Le gusta oírse. Mejora
en el turno de preguntas: improvisa un monólogo en el que enlaza como un ilusionista el
faro con el problema de la longitud, el escorbuto, y explica por qué los
bucaneros se llaman así.</li>
<li>Le otorga capacidad reinsertiva a la
cárcel, porque aprendían un oficio y cobraban un sueldo, y dice que
cerrarla para acercar a los presos es una maniobra económica disfrazada
de humanismo.</li>
<li>De entre los presos de la cárcel, del que más
habla es del Petiso Orejudo. Hay una figura de cera, está en las postales que venden,
y también pintado en un mural de la ciudad, en la oficina del Correo. Teniendo una historia de presos que habían sido disidentes
políticos, o revolucionarios, nos llama la atención que se centren
tanto en un psicópata.</li>
<li>Habla mucho también del faro de San Juan
de Salvamento, en Isla de los Estados. Sale en una novela póstuma de
Verne, que aquí tienen por mundialmente famosa.</li>
</ul>
<div>
Cenamos ñoquis con vegetales. El vino que hemos comprado no está bueno, pero queda bien para rehogar la cebolla. Tardamos dos
horas en hacer la cena: la sartén y la olla son muy grandes, y los
hornillos muy pequeños. Adri duerme mientras cocino y bebo vino blanco.</div>
<div>
<br /></div>
Noéhttp://www.blogger.com/profile/01510460993976112884noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2389922737459113578.post-71814165631905538372019-05-19T22:16:00.000+02:002020-04-20T01:49:47.443+02:00Patagonia. Día 4.<div>
Familia de mexicanos ricos y bien avenidos en el desayuno. Se
decían que se querían mucho al despedirse para ir a la habitación a
lavarse los dientes.</div>
<div>
Kayak en el Perito Moreno.</div>
<div>
Guía ecologista y muy contrario a las centrales hidroeléctricas.
His name is Andrés. Habla inglés mal, pero lleva cuatro meses en la
empresa y es el que da todas las explicaciones.</div>
<div>
También se atreve a explicar en inglés el peronismo.</div>
<div>
Adri está contenta porque los otros de la excursión son “igual de
cardos que nosotros”. Yo los miro como un perrillo que acaba de
descubrir que no quieres jugar con él y se siente traicionado.</div>
<div>
Arco iris doble al ir, se veía la luz a través de la lluvia y era muy bonito.</div>
<div>
Vimos cómo caían muchos trozos de hielo. Tenemos fotos del frente en las que se aprecia el cambio.</div>
<div>
Iba muy tenso en el kayak, y echándole la culpa a Adriana de todo. En otro orden de cosas, íbamos haciendo círculos.</div>
<div>
El traje seco es más cómodo que el neopreno de 12 mm.</div>
<div>
Atravesamos un iceberg por el medio.</div>
<div>
Por la noche bajamos desde el hotel a Calafate. Yo cojeo de la
rodilla y Adri del pie, y tenemos mucho frío. Aún así, cuando nos para
una taxista, la espantamos como a una paloma encima del tendal.</div>
<div>
Cenamos crepes en un sitio que se llama “Viva la Pepa”, en el que
explican la historia de la expresión con bastante precisión, y como si
fuese algo exótico.</div>
<div>
Después de la cena, tenemos que hacer tiempo durante una hora para esperar al taxi del hotel.</div>
<div>
Pasamos la hora caminando por Calafate, de nuevo al frío. Adri me
pide que le explique historia argentina. Improviso bastante. Me acuerdo
de López Rega, pero no de Alfonsín.</div>
Noéhttp://www.blogger.com/profile/01510460993976112884noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2389922737459113578.post-10678074777091066732019-05-19T16:22:00.000+02:002019-05-21T18:51:49.499+02:00Patagonia. Día 3.<div>
<span style="font-size: small;">Al final, el traslado a Calafate nos lo reserva el recepcionista del aparthotel, de manera un punto incompetente (llama a Tavo para preguntarle cómo llamar a Las Lengas), pero muy amable (nos ofrece un descuento).</span><br />
<span style="font-size: small;">Se llama Juan. Lleva rastas, es fibroso como un ciclista, y va vestido con ropa de montaña. Por alguna palabra suelta, creemos que puede ser mexicano o colombiano —que es como decir que no tenemos ni idea. Es evidente que es nuevo en el trabajo. Me pregunto si es un escalador que se ha venido a vivir al pie del FitzRoy.</span><br />
<span style="font-size: small;">Mientras escribe el correo de confirmación de la reserva, le comentamos que nuestra siguiente parada, después del Calafate, será Ushuaia. Sonríe, y nos dice que es su gran viaje pendiente, porque se le apareció en un sueño que tenía que ir a un sitio concreto de Ushuaia, y que entonces le pasarían cosas importantes.</span><br />
<span style="font-size: small;">Al escuchar esto reformulo la teoría: ahora su vida es un largo viaje por latinoamérica, parando meses de cada vez —y convenientemente adquiriendo expresiones locales de distintos sitios—,
hasta llegar a su destino en Ushuaia; de momento, está en el Chaltén<span style="font-size: xx-small; text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: 10pt;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10pt;"><span style="font-size: xx-small;"><sup>(1)</sup></span></span></span></span></span></span>. Adri se exaspera por el misticismo y la lentitud en escribir el correo, y se me pasa la ocasión de seguir preguntándole.</span><br />
<span style="font-size: small;">La remise de Las Lengas va a venir a buscarnos a las seis de la tarde. Hasta entonces, vamos a ir a la Laguna Torre, a los pies del Cerro Torre.</span><br />
<span style="font-size: small;">Sigue una lista de anéccdotas y opiniones más o menos formadas por dos ratos sueltos de wikipedia con las que entretengo o exaspero a Adri durante el trayecto de ida:</span></div>
<ul class="x_Apple-dash-list">
<li><span style="font-size: small;">Chaltén es un pueblo muy nuevo, fundado y poblado por el gobierno de
una forma bastante artificial en el 85 para tener un asentamiento al
lado de la frontera con Chile, que en ese momento estaba en disputa. La línea de frontera en el tramo
de montañas hacia el sur del FitzRoy todavía no está definida, y el Cerro Torre no es oficialmente de
ninguno de los dos países.</span></li>
<li><span style="font-size: small;">Uno de las primeras maniobras de Kirchner a principios de
los 2000 para saltar a la política nacional cuando todavía era
gobernador de Santa Cruz fue criticar las supuestas concesiones territoriales de Menem a Chile por esta zona de la frontera. </span></li>
<li><span style="font-size: small;">El monte FitzRoy fue nombrado (en honor a Robert FitzRoy) por Francisco Pascasio Moreno, el Perito. El nombre local es Chaltén, que significa "monte humeante", porque las nieblas que vimos ayer son casi perpetuas. Hoy, sin embargo, está despejado, y el que tiene nieblas es el Torre.</span></li>
<li><span style="font-size: small;">Los argentinos pretenden repopularizar el nombre de cerro Chaltén, mientras que los chilenos siguen usando monte FitzRoy en la cartografía.</span></li>
<li><span style="font-size: small;">Tanto el cerro Torre como el FitzRoy son montañas míticas en el mundo de la escalada. Los han subido Honnold y Tommy Caldwell, y por eso la gente los busca en youtube, pero también hay una película de Werner Herzog sobre el cerro Torre, y Jon Krakauer lo cita en "Into thin air".</span></li>
<li><span style="font-size: small;">El alpinista italiano Césare Maestri declaró en el 70 que había ascendido al cerro Torre, pero la gente dudó de él porque no tenía fotos y su rastro no llegaba hasta la cumbre. Volvió al año siguiente, bastante cabreado y con un taladro neumático y un compresor de aire, e instaló cientos de pernos a lo largo de la pared, de forma que lo que hasta entonces había sido un reto imposible se convirtió en una escalada relativamente fácil, sin romanticismo.</span></li>
<li><span style="font-size: small;">En 2012, dos escaladores jóvenes y muy puristas lo ascendieron evitando usar los pernos de Maestri, y mientras descendían fueron arrancándolos uno a uno. Cuando llegaron al Chaltén, un grupo de 40 escaladores menos románticos que ellos quería lincharlos; tuvieron que refugiarse en un supermercado y llamar a la policía<span style="font-size: xx-small; text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: 10pt;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10pt;"><span style="font-size: xx-small;"><sup>(2)</sup></span></span></span></span></span></span><span style="font-size: xx-small; text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: 10pt;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10pt;"><span style="font-size: xx-small;"><sup> (3)</sup></span></span></span></span></span></span>. </span></li>
</ul>
<div>
<span style="font-size: small;">De cara al próximo viaje, le había dicho a Adri que estaban vetadas las islas volcánicas (llevamos unas cuantas seguidas, y no me gusta caminar por campos de lava). Sin embargo, decido durante la caminata que prefiero eso a tener que caminar otra vez por una llanura de morrenas. Adri propone buscar destino de vacaciones en el artículo de la wikipedia de zonas menor densidad poblacional.</span><br />
<span style="font-size: small;">Conocemos a una nena muy simpática en el mirador de Cerro Torre. Se cae y no llora.
Se llama Irupé. Su hermano mayor, Astor, es más revoltoso, y mucho menos gracioso; los padres le
regañan —“¡Asti, Asti!”— para que se esté quieto. </span><br />
<span style="font-size: small;">Al final del camino de vuelta empieza a dolerme la rodilla
izquierda. No lo sé todavía, pero el dolor no parará en los doce días
que me quedan de viaje.</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="font-size: small;">___</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="font-size: small;"><br /></span></div>
<span style="font-size: small;">Hace 12 años escribí para el fanzine de mi amiga Andrea un cuentito
que sucedía durante un viaje en coche; al titularlo, como Andrea es
argentina, busqué en google “carretera mítica argentina”, o algo similar, y le llamé “<a href="https://tiporaretto.blogspot.com/2014/03/ruta-60-i.html"><b>Ruta 40</b></a>”. Y ahora estoy en ella. El remisero va escuchando un disco llamado "Bachata mix".</span><br />
<span style="font-size: small;">Calzada muy estrecha. En lugar de badenes tienen zanjas, que indican con una señal que dice “calzada deformada”, como si hubiese
habido un corrimiento.</span><br />
<span style="font-size: small;">Se dan luces al cruzarse, y los vehículos anchos
(remises, furgones, camiones: son la mayoría) ponen las luces de situación para que se vea su anchura.</span><br />
<span style="font-size: small;">Nos cruzamos con una caravana destelleante de vehículos militares que van al
Chaltén. También pasamos un control militar a la entrada de Calafate, en el que el conductor se pone nervioso: trata de usted a un chaval de unos 22 años, y se le agudiza el tono de la voz.</span><br />
<div>
<br />
<br />
<span style="font-size: 10pt; text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: 10pt;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10pt;"><span style="font-size: xx-small;"><sup>(1)</sup></span></span></span></span></span></span><span style="font-size: x-small; text-align: justify;"> </span><span style="font-size: xx-small;"><span style="text-align: justify;">Buscándolo en google, compruebo que es, efectivamente, colombiano y ciclista. Además, en alguna época tuvo una tienda llamada "Amatista oriental".</span></span><br />
<span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10pt; text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: 10pt;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10pt;"><span style="font-size: xx-small;"><sup>(2)</sup></span></span></span></span></span></span><span style="font-size: xx-small; text-align: justify;"> </span><span style="font-size: xx-small;">Uno de estos escaladores jóvenes y románticos, Hayden Kennedy, estaba esquiando en noviembre de 2017 con su novia cuando un alud se los llevó por delante. Él sobrevivió, en un primer momento</span>, pero se suicidó al día siguiente, cuando comprendió que su novia ya había muerto.</span><br />
<span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10pt; text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: 10pt;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10pt;"><span style="font-size: xx-small;"><sup>(3)</sup></span></span></span></span></span></span><span style="font-size: xx-small; text-align: justify;"> Pocos días después de que Kennedy y su compañero Kruk retirasen los anclajes, el austríaco David Lama hizo cumbre, escalando en libre. No tengo ni idea de escalada, pero el nombre de David Lama me suena, porque se acaba de morir hace un mes, sepultado por un alud en las Rocosas de Canadá, a los 28 años.</span></span></span> </div>
Noéhttp://www.blogger.com/profile/01510460993976112884noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2389922737459113578.post-86178938504775483452019-05-17T21:44:00.001+02:002021-06-27T18:36:43.470+02:00Patagonia. Día 2.<div>
Salimos a caminar sin marcarnos un objetivo claro, sospecho que porque yo no creo que vaya a ser capaz de llegar a la Laguna de los tres. Puede que solo lleguemos a la Laguna Capri (km. 4), o al Mirador del FitzRoy (km. 4); planeamos dar la vuelta a las dos, para que nos dé tiempo a volver con luz.<br />
Día soleado, espectacular para las fotos, aunque el
FitzRoy no despega las nieblas. Por otra parte, voy sudando antes de llegar al mirador del Río de las
Vueltas (km. 0,7), y tengo que pararme cinco minutos a coger aire.<br />
</div>
<div>
Cuando nos dimos cuenta de que el viaje a la Patagonia coincidiría en otoño nos preocupamos por el posible frío, pero lo que nos sorprende ahora son los tonos rojizos del bosque de lengas. Atravesamos los campamentos de Laguna Capri y Poincenot (km. 8), y seguimos avanzando.<br />
Adri dice que los bosques son como los de los árboles grandes que hablan, y las zonas escarpadas al lado del camino como lo de los caballeros sin cabeza. Le gusta ser vaga en sus referencias y dejar que yo las descifre, pero me paso de largo y pierdo tres minutos intentando recordar el nombre de Sleepy Hollow. </div>
<div>
Despues de caminar 9 kilómetros, a eso de la una y media emprendemos la subida final a la Laguna de los tres sin ni siquiera parar a coger aire en el merendero que hay al pie. Adri marcha a buen ritmo por delante, y yo he llegado tan lejos con respecto a lo que anticipaba, que asumo que acabaré llegando al final.<br />
A los doscientos metros, sin embargo, me doy cuenta, de manera repentina, de que no puedo más. Paramos a comer en un mirador desde el que vemos el camino que hemos recorrido.<br />
Al terminar tenemos el cuerpo frío, y echando cuentas nos convencemos de que no nos dará tiempo a volver con día si completamos la subida, y en general acordamos que se nos han pasado a ambos las ganas de seguir.</div>
<div>
Adri se da la vuelta para mirar hacia el pico
cada dos o tres minutos. No es el cansancio —ella no va tan cansada como yo—, sino la melancolía por
estar emprendiendo el camino de vuelta desde un sitio al que no llegaremos nunca.<br />
<div>
Al llegar de nuevo al pueblo caminamos todavía un rato más, porque Adri pretende buscar la estación para reservar un autobús para mañana; yo protesto y pataleo como un niño pequeño hasta que Adri se resigna a volver al apartamento sin los billetes.</div>
<div>
Notas sueltas sobre el Chaltén:</div>
<div>
<ul>
<li>Barrio en cuadrícula con edificios oficiales y casas tipo suburb americano.</li>
<li>Zona
nueva en ampliación, pero desordenada: respetan la cuadrícula, pero
cada casa es como puede el dueño: chalets alpinos con tejados exageradamente agudos, junto con chabolas, casas de ladrillo sin
rematar, de chapa, a hormigón sin pintar, con el aislante por fuera. Especulamos con que sea por un sentimiento de independencia y egoismo a la estadounidense —exagerado por la crisis económica y el aislamiento del pueblo—, o tal vez la despreocupación de
montañeros medio hippies por los bienes materiales. No tenemos, en definitiva, ni idea.</li>
<li>No tiene tamaño suficiente para que haya Zara, pero hay una tienda North Face.</li>
<li>Rematadas o no, todas las casas son cámpings, hoteles u hospedajes. En muchas fincas hay aparcadas furgonetas que se anuncian como maxikioskos o puestos de choripán.</li>
<li>Docenas de perros sueltos.</li>
<li>Muchos militares.</li>
</ul>
Entre trekking y recados, hemos hemos caminado unos veinte kilómetros, así que en el apartamento no hacemos otra cosa que ducharnos, cenar, y echarnos en cama a ver la televisión. Hay dos smart TVs, una en el salón y otra en la habitación. En la que encendemos están guardadas las búsquedas en youtube que hicieron los anteriores huéspedes: vídeos de Alex Honnold y de Tommy Caldwell. Nosotros nos dormimos a las diez viendo twitter.</div>
</div>
Noéhttp://www.blogger.com/profile/01510460993976112884noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2389922737459113578.post-66135226510791278102019-05-17T03:03:00.001+02:002021-06-27T18:34:08.147+02:00Patagonia. Día 1.<div>
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Vómitos y diarrea en el vuelo transoceánico. Muchas turbulencias. Paramos en São Paulo dos horas por niebla en Ezeiza.<br />
Este es el plan de viaje: avión de Santiago a Frankfurt, y de ahí a Buenos Aires (Ezeiza). Cambio en bus de Ezeiza al Aeroparque para coger avión a Calafate, y de ahí en micro al Chaltén.</div>
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Desde el autobús que nos lleva de Ezeiza al Aeroparque —Empresa Manuel Tienda León— vemos mucha diferencia de alturas entre las casas de Buenos Aires, y muchas chabolas a unos cien metros de Puerto Madero.</div>
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El Aeroparque está al lado del mar. Están haciendo un relleno para
ampliarlo; la gente va a pescar, entre máquinas que mueven tierra.<br />
Es de noche en nuestro viaje de Calafate al Chaltén. El conductor —Las Lengas, buen servicio— va oyendo los resultados del fútbol, y todos los pasajeros se duermen uno a uno con el sonido de fondo de goles irrelevantes, menos yo, que sigo mareado. Me molestan mucho las luces de los coches que vienen en el otro sentido; sospecho que al conductor también, porque aminora la marcha hasta frenar casi por completo al cruzarse con ellos. <br />
Los faros de la remise espantan a un zorro que estaba comiendo los restos de algún animal sobre la calzada. El conductor pasa con cuidado sobre el cadáver para no pisarlo más aún.<br />
Las primeras en bajarse del micro son las dueñas de la librería local, que vienen de Calafate con dos maletas y cinco bolsas llenas de libros <br />
El recepcionista de nuestro aparthotel en el Chaltén es un poco incompetente, y muy atento. Ha perdido la reserva de una pareja de canadienses, y tiene que llamar a su jefe Gustavo ("Tavo") a las once de la noche para preguntarle si puede meterlos en un apartamento vacío.<br />
A cambio, cuando le explicamos que no hemos cenado todavía nos trae el desayuno de mañana; cenamos colacao con alfajores y dulce de
leche.<br />
Nos vamos a dormir, después de 36 horas de viaje y cinco conexiones, que sorprendentemente han salido bien. No sabemos cómo apagar la calefacción.</div>
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Noéhttp://www.blogger.com/profile/01510460993976112884noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2389922737459113578.post-51957453680422670262018-10-28T19:25:00.001+01:002020-05-19T19:16:39.147+02:00What's making me happy this weekEn el podcast "<i>Pop Culture Happy Hour</i>" hacen una sección de recomendaciones culturales, llamada "<i>What's making me happy</i>". Creo que han escogido ese nombre para no parecer prescriptivistas: sus recomendaciones no son necesarias ni obligatorias, sino cosas que les gustan y quieren compartir.<br />
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___</div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
Llevo un mes viendo el canal de youtube de un carpintero japonés. Trabaja en silencio, practicamente no emplea música en sus vídeos, hace paradas para salir a pasear con su perro, y pone mucho empeño en que el cepillo siempre esté bien alineado.<br />
La estructura repetitiva me relaja, su sobriedad me resulta satisfactoria, sus imágenes me sugieren una vida —en pareja, en la naturaleza, artesanal— sencilla y bucólica. Hablar de ellos es inútil y es una traición, pero los vídeos de <i><a href="https://www.youtube.com/watch?v=Iii3W-O6Lvo&list=UU7FkqjV8SU5I8FCHXQSQe9Q"><b>Ishitani furniture</b></a></i> me hacen feliz.<br />
<br />Noéhttp://www.blogger.com/profile/01510460993976112884noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2389922737459113578.post-11861704885622969392017-10-03T11:07:00.002+02:002018-09-06T12:16:24.481+02:00Fragmento de "Alex's Adventures in Numberland", de Alex BellosMe ha gustado mucho, pese al título, <i>"Alex's adventures in Numberland"</i><span style="background-color: white; color: #666666; font-family: "arial" , "tahoma" , "helvetica" , "freesans" , sans-serif; font-size: x-small; text-align: justify;"><span style="font-family: "calibri";"><span style="font-size: 10pt;"><span style="font-size: 10pt;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10pt;"><span style="font-size: xx-small;"><sup>(1)</sup></span></span></span></span></span></span></span>; me ha resultado especialmente satisfactorio el capítulo de geometría no euclídea, en primer lugar porque es un tema al que le tengo cierto cariño (fue una de mis asignaturas favoritas en la carrera, aunque a estas alturas solo recuerde de ella que me gustaba), y en segundo lugar por la historia que deja caer en este medio folio sobre matemáticos de la Europa oriental:<br />
<blockquote class="tr_bq">
<div style="text-align: justify;">
Uno de los aspirantes a probar el postulado de las paralelas<span style="background-color: white; color: #666666; font-family: "arial" , "tahoma" , "helvetica" , "freesans" , sans-serif; font-size: x-small;"><span style="font-family: "calibri";"><span style="font-size: 10pt;"><span style="font-size: 10pt;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10pt;"><span style="font-size: xx-small;"><sup>(2)</sup></span></span></span></span></span></span></span> a partir de los otros cuatro (y demostrar con ello que no era un postulado, sino un teorema) era Janós Bolyai, un estudiante de ingeniería de Transilvania. Su padre, que era matemático, conocía la dimensión del desafío porque él mismo había fracasado al intentarlo, y le imploró que se detuviese: "Por Dios te lo suplico, abandona. Témelo tanto como las pasiones sensuales, pues también esto ocupará todo tu tiempo, y te privará de la salud, la tranquilidad y la felicidad en la vida".</div>
<div style="text-align: justify;">
Janós ignoró el consejo de su padre, pero esa no fue su mayor rebelión: se atrevió a considerar que el quinto postulado pudiese ser falso. "Los Elementos" era para las matemáticas lo que la Biblia para la cristiandad: un libro infalible, una verdad sagrada. Había debate sobre si el quinto era un axioma o un teorema, pero nadie había tenido la osadía de sugerir que pudiese no ser cierto. Hacerlo resultó ser la puerta a un nuevo mundo.</div>
<div style="text-align: justify;">
El postulado de las paralelas dice que, para una línea cualquiera y un punto cualquiera que no esté sobre esa línea, existe <i>como mucho una</i> paralela a la línea que pase por el punto. La audacia de Janós fue postular, en lugar de eso, que <i>más de una</i> paralela a la línea pasaría por el punto. Aunque no estaba claro cómo visualizar una superficie para la cual esta afirmación fuese cierta, Janós se dio cuenta de que la geometría creada al unir su afirmación a los cuatro primeros postulados seguía siendo matemáticamente consistente.</div>
<div style="text-align: justify;">
Era un descubrimiento revolucionario, y Janós reconoció su importancia. En 1823 escribió a su padre anunciando: "De la nada, he creado un nuevo universo".</div>
<div style="text-align: justify;">
Probablemente a Janós le ayudó el hecho de que estaba trabajando al margen de todas las instituciones matemáticas, y por tanto estaba menos adoctrinado por las visiones tradicionales. Incluso después de haber hecho su descubrimiento, decidió no dedicarse a las matemáticas. Después de graduarse se unió al ejército austro-húngaro, donde fue considerado el mejor bailarín y espadachín de entre sus colegas. También era un músico extraordinario, y se dice que en una ocasión retó a trece oficiales a duelos, con la condición de que, si vencía, le tocaría al perdedor una pieza con su violín.</div>
<div style="text-align: justify;">
Sin que Janós lo supiese, y desde un punto todavía más alejado de los centros académicos europeos que Transilvania, otro matemático estaba haciendo de manera independiente avances similares, pero su trabajo fue rechazado por el <i>establishment </i>matemático.</div>
<div style="text-align: justify;">
En 1826, Nikolai Ivanovich Lobachevsky, un profesor de la Universidad de Kazan en Rusia, presentó a la Academia de Ciencias de San Petersburgo un paper en el que cuestionaba el postulado de las paralelas. Fue rechazado, así que Lobachevsky decidió publicarlo en un periodico local de Kazan. Consecuentemente, nadie le hizo ningún caso.</div>
</blockquote>
<br />
<span style="font-size: 10pt; text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: 10pt;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10pt;"><span style="font-size: xx-small;"><sup>(1)</sup></span></span></span></span></span></span><span style="font-size: x-small; text-align: justify;"> </span><span style="font-size: x-small;">Los dos libros sobre matemáticas de Alex Bellos, "<i>Alex's adventures in Numberland</i>" y "<i>Alex through the looking glass</i>" fueron reeditados en Estados Unidos, respectivamente, como "<i>Here's looking at Euclid</i>" y "<i>The grapes of Math</i>". Opino que el título del primero mejora mucho con la reedición, pero se me escapa qué pretendían al cambiar las referencias a Alicia por Steinbeck, francamente.</span><br />
<span style="font-size: 10pt; text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: 10pt;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10pt;"><span style="font-size: xx-small;"><sup>(2)</sup></span></span></span></span></span></span><span style="font-size: x-small; text-align: justify;"> Y es aquí, en la segunda nota al pie de una entrada que, honestamente, tendría que haber sido simplemente una transcripción, sin haberme distraído ni siquiera con traducirla, donde voy a exponer los cinco postulados de la geometría euclídea.</span><br />
<span style="font-size: x-small; text-align: justify;">Los postulados son verdades fundamentales </span><span style="background-color: white; color: #666666; font-family: "arial" , "tahoma" , "helvetica" , "freesans" , sans-serif; font-size: x-small; text-align: justify;">—</span><span style="font-size: x-small; text-align: justify;">que Euclides da por evidentes y no demuestra</span><span style="background-color: white; color: #666666; font-family: "arial" , "tahoma" , "helvetica" , "freesans" , sans-serif; font-size: x-small; text-align: justify;">—</span><span style="font-size: x-small; text-align: justify;">, que constituyen la base para todos sus razonamientos posteriores.</span><br />
<span style="font-size: x-small; text-align: justify;">Y los cuatro primeros, desde luego, parecen simples y evidentes a estas alturas: dos puntos determinan un segmento, un centro y un radio determinan una circunferencia, cualquier segmento se puede extender indefinidamente en cualquier dirección en una recta, y todos los ángulos rectos son iguales entre sí. Aunque no tengo claro qué significa exactamente lo que acabo de decir, parecen básicamente cuatro perogrulladas.</span><br />
<span style="font-size: x-small; text-align: justify;">El problema viene en el quinto, el "postulado de las paralelas", cuya formulación original ("Si una línea recta corta a otras dos, de tal manera que la suma de los dos ángulos interiores del mismo lado sea menor que dos rectos, las dos rectas se cortan, al prolongarlas, por el lado en el que están los ángulos menores que dos rectos") es tan fea y enrevesada</span><span style="font-size: 10pt; text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: 10pt;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10pt;"><span style="font-size: xx-small;"><sup>(3)</sup></span></span></span></span></span></span><span style="font-size: x-small; text-align: justify;"> </span><span style="font-size: x-small; text-align: justify;">que ha motivado a un número de matemáticos a lo largo de la historia para tratar de degradarlo y eliminarlo de la lista de verdades fundamentales, tratando </span><span style="background-color: white; color: #666666; font-family: "arial" , "tahoma" , "helvetica" , "freesans" , sans-serif; font-size: x-small; text-align: justify;">—</span><span style="font-size: x-small; text-align: justify;">como se dice en el texto original, del cual esto sigue siendo, increíblemente, una mera nota al pie</span><span style="background-color: white; color: #666666; font-family: "arial" , "tahoma" , "helvetica" , "freesans" , sans-serif; font-size: x-small; text-align: justify;">— </span><span style="font-size: x-small; text-align: justify;">de probarlo a partir de los otros cuatro postulados.</span><br />
<span style="font-size: 10pt; text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: 10pt;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10pt;"><span style="font-size: xx-small;"><sup>(3)</sup></span></span></span></span></span></span><span style="font-size: x-small; text-align: justify;"> Esto ha sido hacer trampa, la verdad, porque una vez que desenredas esa formulación acabas llegando a algo como "dos rectas no paralelas se cortan en un punto", que parece tan simple y evidente como los otros cuatro. La forma más popular del postulado </span><span style="background-color: white; color: #666666; font-family: "arial" , "tahoma" , "helvetica" , "freesans" , sans-serif; font-size: x-small; text-align: justify;">—</span><span style="font-size: x-small; text-align: justify;">la que aparece un poquito más adelante en el texto original, del cual es posible que esto ya no sea una nota al pie</span><span style="background-color: white; color: #666666; font-family: "arial" , "tahoma" , "helvetica" , "freesans" , sans-serif; font-size: x-small; text-align: justify;">— </span><span style="font-size: x-small; text-align: justify;">es la siguiente: "por un punto exterior a una recta se puede trazar una única paralela". </span>Noéhttp://www.blogger.com/profile/01510460993976112884noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2389922737459113578.post-39518115477404478242017-03-25T18:32:00.002+01:002018-09-22T17:19:26.525+02:00Sobre el motín de la Santa Ana, según el capitán Urioste (I)<div style="text-align: justify;">
</div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: small;">El 8 de agosto de 1804, Ramón de Urioste, capitán de la fragata Santa Ana, se sentó en un despacho de la capitanía marítima del puerto de Vigo para presentar una protesta de mar. Tenía una historia muy interesante que contar: sables, traición e intriga, un motín, la amenaza latente de los piratas.</span><br />
<span style="font-size: small;">Lástima que lo hiciese tan mal.</span></div>
<div style="text-align: center;">
____</div>
<div style="text-align: justify;">
<br />
<span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: small;">Lástima, también, que os tengáis que enterar de ella por mí, que no conozco el vocabulario náutico y soy incapaz de hacer avanzar una historia.</span></span><br />
<span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: small;">Por empezar dando ya marcha atrás (¿"atrás toda"?), una protesta de mar es una especie de acta notarial que se emplea en derecho marítimo; en ella, el capitán de un barco que ha sufrido retrasos o averías hace una crónica de su viaje explicando sus problemas, y en general tratando de lavarse las manos por las pérdidas económicas</span></span><span style="font-size: small;"><span style="font-family: "calibri";"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"><sup>(1)</sup></span></span></span></span></span></span></span>. En el caso de Urioste, aquel día tendría que estar ya en Santander descargando de su barco pimienta de Tabasco y palo de Campeche, y le tocaba justificar qué hacía todavía en Galicia. </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: small;">Sus problemas habían comenzado prácticamente al partir de la Habana. Se había puesto de acuerdo con una polacra catalana para ir en caravana y protegerse mutuamente de los piratas. Una polacra es una embarcación, según la Wikipedia, "similar al jabeque con dos palos triples, sin cofas ni crucetas y con el mismo velamen que los bergantines", signifique eso lo que signifique</span><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;"><span style="font-family: "calibri";"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"><sup>(4)</sup></span></span></span></span></span></span></span>.</span></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: small;">El caso es que una fragata como la Santa Ana tiene tres palos y más vela que las polacras, así que </span><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;">tenía que ir parándose constantemente para no separarse de la otra</span>, en lugar de escapar de los piratas lo más rápido posible. Y los marineros, que no veían gran ventaja en esto, se fueron poniendo más nerviosos con los días.</span><br />
<span style="font-size: small;">Urioste dice que "no [había notado] hasta entonces cosa alguna en toda la tripulación más que solo horrorosos juramentos y maldiciones" </span><span style="font-size: small;">—las frases de Urioste son así, por cierto: parece que al acercarse al final ya no recuerda cómo las había empezado</span><span style="font-size: small;">—, pero ya a su paso por los Cayos se dio cuenta de que "siendo necesarias algunas maniobras, las rehusaban practicar y si las hacían era contra su voluntad y de la sumisión que en iguales circunstancias debían tener".</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: small;">Los barcos se separaron al salir del Caribe, pero la desconfianza entre Urioste y sus subordinados siguió creciendo. Según el capitán </span><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;">—quién tuviese la versión de la otra parte</span></span><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;">—, </span></span>los marineros mostraban "una notable soberbia y (...) vanidad", y se burlaban de sus operaciones "con desvergüenza e improperio".</span><br />
<span style="font-size: small;">En algún momento hacia el final del viaje Manuel Nicolín, el piloto, le da parte de un enfrentamiento que ha tenido con la tripulación. Al parecer había unos cuantos marineros agrupados en el alcázar de popa, y Nicolín, que tenía que andar por cubierta de aquí para allá haciendo observaciones de navegación, les pidió que se quitasen del medio y no lo molestasen; en ese momento, el timonel saltó de su puesto y "pidiendo un cuchillo a uno de sus compañeros se le present[ó] con él desenvainado pidiéndole satisfacciones".</span><br />
<span style="font-size: small;">A primera vista, parece una reacción bastante exagerada. Sin embargo, en la siguiente frase Urioste deja caer </span><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;">—</span>en medio de una subordinada, sin darle importancia</span><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;">—</span> </span><span style="font-size: small;">que el contramaestre y el cocinero se habían amotinado algunos días antes. </span>Sin dejar que nos replanteemos la escena anterior con la nueva información que nos ha dado, el capitán se lanza en su crónica a narrar lo que pasa el 3 de agosto, horas antes de avistar tierra.<br />
<span style="font-size: small;">Ni </span><span style="font-size: small;">siquiera cambia de frase, pero ha pasado el suficiente tiempo como para que el cocinero se haya olvidado, a saber cómo, de quién está en su bando. De entre toda la gente del barco, decide hablar precisamente con el piloto para pedirle que le consiga un par de sables "para defenderse en caso de ataque".</span><br />
<span style="font-size: small;">Evidentemente, Nicolín se niega. Entonces, el cocinero decide simplemente bajar a la cámara a cogerlos él mismo, quizás dándose cuenta de esa posibilidad por primera vez.</span><br />
<span style="font-size: small;">Se produce entonces una escena que Urioste narra confusamente, como de costumbre</span>: <span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;"> </span></span><br />
<blockquote class="tr_bq">
<span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;"><i>"(...) bajó entonces el mismo cocinero a la cámara y, tomando de ella un sable y ocultándolo con el capote que tenía puesto, se sentó sobre el gallinero, y </i></span></span></span><i>visto por el timonel llamado El Asturiano, le ha dicho que se arrimase pues quería darle conversación, y observando de ella el propio piloto el que el cocinero titubeaba al hablar y que apenas podía pronunciar con claridad, cosa que hasta entonces no había observado en él, se le acercó, y le dijo por una, dos y tres veces qué era lo que llevaba bajo el capote, y que se verificó con bastante sentimiento..."</i></blockquote>
<span style="font-size: small;">El cocinero acaba de lograr su objetivo de conseguir un arma, aparentemente sin más problema que bajar unas escaleras y cogerla</span>; pero está nervioso hasta el punto de no ser capaz de hablar, tal vez abrumado de repente por la responsabilidad de matar con sus manos al piloto y al capitán. <span style="font-size: small;">Nicolín lo sorprende conspirando con el timonel, y decide ir a echarles una</span><span style="font-size: small;"> bronca de profesor severo a dos repetidores de instituto.</span><br />
En algún momento, sin embargo, la naturaleza de la conversación cambia, y Nicolín se da cuenta de que está en peligro, así que decide escaparse de la sala en la que está, y se marcha al camarote del contramaestre a hablar con él.<br />
<span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;">Tienen una conversación larga en la intimidad de la habitación. Nicolín le cuenta al contramaestre el encontronazo que acaba de tener, lo poco que se fía del cocinero, la sospecha de que estará conspirando para matarlo. El contramaestre sonríe y le contesta que se tranquilice, que sabe de buena tinta que el cocinero es de su bando.</span></span></span><br />
<span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;">Y es en ese momento cuando caen de la burra. Llevan un buen rato hablando </span></span></span><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;">—</span>uno sentado en el catre, el otro tal vez apoyado en la puerta y bebiendo por los nervios</span></span></span></span><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;">—</span> </span></span>pero no se les había ocurrido hasta ahora.</span></span></span><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;"> Uno empieza a decir "espera, espera...", y el otro "pero eso quiere decir que-", pero se interrumpen a mitad de frase. Se acaban de dar cuenta de que están en bandos enemigos.</span></span></span><br />
<div style="text-align: center;">
____</div>
<br />
<span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;">Aunque esta es, por supuesto, solo la versión de Urioste. Opino que no es justa en absoluto con su piloto. En la narración del capitán, las cosas le van cayendo encima por casualidad: le atacan cuando solo pretende hacer su trabajo, le confiesan de manera inverosímil planes secretos para rebelarse, se escapa del cocinero para ir a meterse como un pollo sin cabeza en el camarote del contramaestre.</span></span><br />
<span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;">Se me ocurre que hay otra versión de los mismos acontecimientos, en la que ambos </span></span><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;">—</span></span>contramaestre y piloto</span></span><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;">—</span></span>, llevan probablemente un mes jugando una partida de ajedrez, escondiendo sus intenciones, espiándose mutuamente y esperando acontecimientos.</span></span><br />
<span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;">El piloto ve una reunión sospechosa de marineros en cubierta y agarra una brújula para ir a infiltrarse entre ellos y ver qué traman; y aunque lo echan con malos modos, es capaz de mantener la suficiente cordialidad con ellos como para que días después le vayan a pedir armas a él. El contramaestre tiene el apoyo de la tripulación, pero come todos los días con los oficiales </span></span><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;">—</span></span></span></span>una hora al día con Urioste, Nicolín y el mozo de cámara</span></span><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;">, a puerta cerrada—</span></span></span></span>, así que juega a dos bandas, incitando a los marineros al motín mientras llena de buenas palabras a sus compañeros de mesa.</span></span><br />
<span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;">Así van conviviendo, día a día, midiendo los gestos propios y los ajenos; hasta que el 3 de agosto, después de enfrentarse al cocinero, Nicolín comprende que no merece la pena seguir disimulando y va al camarote del contramaestre a confrontarlo directamente.</span></span><br />
<span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;">Y es imposible que la conversación sea tan ridícula como la vende Urioste, pero al final se llega al mismo punto: el momento crucial, en la cercanía forzada del camarote, al final de su batalla íntima, en el que los dos se convencen finalmente de que se ha acabado el tiempo del espionaje, de que la guerra abierta es inevitable, y están en trincheras enemigas.</span></span><span style="font-size: small;"><span style="font-size: small;"> </span></span><br />
<br />
<span style="font-size: small;">REFERENCIAS:</span>
<br />
<span style="font-size: small;">"<i><a href="https://www.amazon.es/NAVEGANTES-CORSARIOS-PIRATAS-BAIXAS-1780-1850/dp/8460721493">Navegantes, corsarios y piratas</a></i>", de Alberto Fortes</span><span style="font-size: x-small;"><span style="font-size: small;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"></span></span></span></span></span></span><i>.</i></span><br />
<br />
<br />
<span style="font-family: "calibri";"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"><sup>(1)</sup></span></span></span></span></span></span><span style="font-size: x-small;"><span style="font-size: xx-small;"> </span>Un detalle simpático es
que el capitán parece tener que nombrar un culpable de sus problemas y dirigir
contra él su protesta</span></span><span style="font-family: "calibri";"><span style="font-size: x-small;">. Esto es bastante directo si has sufrido un ataque del corsario
tal o cual, pero te hace parecer desesperado si lo que te ha pasado ha sido una acumulación de pequeños
contratiempos. En un documento que leí, el capitán
protestaba “una, dos, tres y las más veces permitidas en derecho contra la mar,
sus olas, vientos contrarios, cargadores y fletadores, aseguradores,
consignatarios y más contra quién protestar deba”</span></span><span style="font-family: "calibri"; font-size: x-small;"><span style="font-family: "calibri"; font-size: xx-small;"><span style="font-family: "calibri";"><span style="font-family: "calibri";"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"><sup>(2)</sup></span></span></span></span></span></span></span></span></span>.<span style="font-size: xx-small;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"><sup> </sup></span></span></span></span></span></span></span><br />
<span style="font-family: "calibri"; font-size: x-small;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"><sup>(2)</sup></span></span></span></span></span></span><span style="font-size: xx-small;"> <span style="font-size: x-small;">Esto me recuerda algo que escuché hace tiempo en Futility Closet y reconté en <a href="https://twitter.com/i/moments/840718488306102272"><b>este momento de Twitter.</b></a><span style="font-size: small;"><span style="font-family: "calibri";"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"><sup> </sup></span></span></span></span></span></span></span></span></span></span></span><span style="font-family: "calibri"; font-size: x-small;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"><sup>(3)</sup></span></span></span></span></span></span></span><br />
<span style="font-family: "calibri"; font-size: x-small;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"><sup>(3)</sup></span></span></span></span></span></span><span style="font-size: xx-small;"> <span style="font-size: x-small;">Puestos a caer en madrigueras que no vienen a cuento, el caso de RMS. Titanic, Inc. contra el barco RMS Titanic me ha recordado que John Fogerty, el compositor de la CCR, fue denunciado por plagiarse a si mismo. El denuciante fue su antigua compañia discográfica, que poseía el copyright de una canción que luego él trató de versionar cambiándole la letra. En fin, la historia en realidad no hace más que ensuciar el titular.</span></span></span><br />
<span style="font-family: "calibri"; font-size: x-small;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: x-small;"><span style="font-size: small;"><span style="font-family: "calibri";"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"><sup>(4)</sup></span></span></span></span></span></span></span></span> </span></span></span><span style="font-family: "calibri"; font-size: x-small;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: x-small;">El palo de Campeche, por cierto</span></span></span><span style="font-family: "calibri"; font-size: x-small;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: x-small;">, es un árbol leguminoso originario del Yucatán. Se utilizaba como tinte negro o azul oscuro para tejidos. Su nombre científico es <i>Haematoxylum Campechianum</i>, lo cual me resulta tan gracioso que he hecho un pie de texto solo para contároslo.</span></span></span></div>
Noéhttp://www.blogger.com/profile/01510460993976112884noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2389922737459113578.post-61664343516294761632017-03-23T01:42:00.000+01:002017-04-10T12:11:40.764+02:00<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: medium;">El nuevo podcast de Serial, <a href="https://stownpodcast.org/"><b>S-Town</b></a>, se estrena el 28 de marzo; de momento han colgado en su feed un pequeño capítulo de tres minutos para ir creando interés. Y es la mejor introducción a un texto que he leído en mucho tiempo. Espero que no importe mucho que lo reproduzca aquí.</span><br />
<span style="font-size: medium;"><i><br /></i></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: medium;"><i>When an antique clock breaks <span style="background-color: white; color: #666666; font-family: "arial" , "tahoma" , "helvetica" , "freesans" , sans-serif;">—</span>a clock that's been telling time for 200 or 300 years<span style="background-color: white; color: #666666; font-family: "arial" , "tahoma" , "helvetica" , "freesans" , sans-serif;">—</span>, fixing it can be a real puzzle.</i></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: medium;"><i>An old clock like that was hand-made by someone. It might take away the time with a pendulum, with a spring, with a pulley system. It might have bells that are supposed to strike the hour, or a bird that's meant to pop out and cuckoo at you. There can be hundreds of tiny individual pieces, each of which needs to interact with the others precisely.</i></span><br />
<span style="font-size: medium;"><i>To make the job even trickier, you often can't tell what's been done to a clock over hundreds of years. Maybe there's damage that was never fixed, of fixed badly. Sometimes entire portions of the original clockwork are missing, but you can't know for sure because there are rarely diagrams of what the clock is supposed to look like; a clock that old doesn't come with a manual.</i></span><br />
<span style="font-size: medium;"><i>So, instead, the few people left in the world who know how to do this kind of thing rely on what are often called 'witness marks' to guide their way. A witness mark could be a small dent, a hole that once held a screw. These are actual impressions and outlines and discolorations left inside the clock of pieces that might once have been there. They're clues to what was in the clockmaker's mind when he first created the thing.</i></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: medium;"><i>I'm told fixing an old clock can be maddening; you're constantly wondering if you've just spent hours going down a path that will likely take you nowhere, and all you've got are these vague witness marks, which might not even mean what you think they mean. So at every moment along the way you have to decide if you're wasting your time or not. </i></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: medium;"><i>Anyway, I only learned about all this because, years ago, an antique clock restorer contacted me and asked me to help him solve a murder.</i></span></div>
Noéhttp://www.blogger.com/profile/01510460993976112884noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2389922737459113578.post-68519709881554167392017-01-22T02:33:00.001+01:002018-08-20T12:41:12.419+02:00<div style="text-align: justify;">
Quería regalarle a Adri un tocadiscos y un par de vinilos por navidades.
Porque somos, según parece, de esa clase de gente; también compro libros de papel, y tomo cafés en cafeterías <i>vintage</i>. No es algo de lo que me enorgullezca —no es que me vaya a poner a escribir sobre la poesía del olor de los libros—, pero supongo que a determinada edad es bueno simplemente aceptarte a ti mismo, asumir que en el fondo te gustan las cosas bonitas, y comprarle a tu novia —por ridículamente nostálgico que suene si lo piensas bien— el tocadiscos que lleva apetenciéndole desde los 25 años.</div>
<div style="text-align: justify;">
El caso es que, como rijo mi vida por un estricto código de incompetencia e indecisión, dejé pasar el tiempo con la tranquilidad de haber tenido una buena idea —que siempre es lo más complicado—, sin preocuparme de desarrollarla. De repente llegó el día de Navidad y yo solo había conseguido comprar dos vinilos, que son bonitos como objetos <i>and whatnot</i>, pero pierden bastante como regalo aislado sin la posibilidad de escucharlos.</div>
<div style="text-align: justify;">
No es, de hecho, solamente que "pierdan bastante", dejadme volver tras mis pasos; regalarle dos LPs sin tocadiscos es una buena idea que después no me preocupé de llevar a cabo hasta que ya era demasiado tarde. Como la <a href="http://tiporaretto.blogspot.com.es/2014/11/escribamos-una-novela-en-un-dia.html">NeuD</a>, como la <a href="http://tiporaretto.blogspot.com.es/search/label/%23mariapopova">#mariapopova</a>; me pasa constantemente.<br />
Y lo peor es que la idea ni siquiera era particularmente original. Por ejemplo, a ella misma se le había ocurrido.</div>
<div style="text-align: justify;">
Por su cuenta, sin haber hablado del tema desde hace años, Adri decidió en estas navidades regalarme un tocadiscos y un par de vinilos. Después también se le echó el día encima y no tuvo tiempo de buscar los LPs, así que solo pudo comprar el tocadiscos.</div>
<div style="text-align: justify;">
Parece que somos de esa clase de gente; incapaces de resolver en solitario todos nuestros problemas, pero complementarios.</div>
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</div>
Noéhttp://www.blogger.com/profile/01510460993976112884noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2389922737459113578.post-80428925804213107772016-06-14T02:19:00.003+02:002017-10-07T20:12:05.188+02:00Fragmento de "The Age of Wonder", de Richard Holmes(1)<div style="text-align: justify;">
<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhNKtsIMpbNKxzJKGc1Uc4sb0D-MjPb6vQFmHMWJJhrdABItgrj6TEPgqe4-fZZUYUm2iUDPMoqj-CRaeK-SkI1Hl7CKco41-Ut_Ro9hSTxCYzhmd10UdMvRvaMjrvUiYk3c5zE4-iupdk/s1600/Captura.JPG" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="311" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhNKtsIMpbNKxzJKGc1Uc4sb0D-MjPb6vQFmHMWJJhrdABItgrj6TEPgqe4-fZZUYUm2iUDPMoqj-CRaeK-SkI1Hl7CKco41-Ut_Ro9hSTxCYzhmd10UdMvRvaMjrvUiYk3c5zE4-iupdk/s320/Captura.JPG" width="320" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><span class="mw-mmv-source-author"><span class="mw-mmv-author"><a class="extiw" href="https://fr.wikipedia.org/wiki/Claude-Louis_Desrais" title="fr:Claude-Louis Desrais">Claude-Louis Desrais</a></span> - <span class="mw-mmv-source">Bildarchiv <a class="extiw" href="https://de.wikipedia.org/wiki/Stiftung_Preu%C3%9Fischer_Kulturbesitz" title="de:Stiftung Preußischer Kulturbesitz">Preussischer Kulturbesitz, Berlin</a></span></span></td></tr>
</tbody></table>
<br />
«Jean François Pilâtre de Rozier era un profesor de filosofía natural, que dirigía un pequeño zoo y tenía una academia en la rue Saint-Honoré. Tenía 29 años. Había inventado una máscara de gas, una antorcha de hidrógeno y una nueva teoría sobre los truenos, todo lo cual parecía relevante para la técnica de los globos aerostáticos. Pequeño, energético y encantador, era un considerable mujeriego; pero junto con su carisma también poseía una extraordinaria sangre fría. Demostró ser valiente y preciso durante situaciones peligrosas, y pronto se hizo indispensable para los Montgolfier. Acababa de inventar la profesión de piloto de pruebas. Tenía <i>lo que hay que tener</i>.</div>
<div style="text-align: justify;">
El primer globo Montgolfier pilotado despegó de La Muette el 21 de noviembre de 1783. Era enorme, monstruoso. Medía 25 metros de altura, y estaba gloriosamente decorado en azul, con dorados que representaban figuras mitológicas; se impulsaba mediante un brasero abierto de dos metros de diámetro en el que ardía paja.</div>
<div style="text-align: justify;">
Los aeronautas escogidos para pilotarlo eran Pilâtre de Rozier y un elegante oficial de la Garde Royale, el Marqués d'Arlandes. D'Arlandes había sido seleccionado por sus conexiones con la Corte, por su entusiasmo y su riqueza; también simplemente porque los Montgolfier necesitaban un contrapeso.</div>
<div style="text-align: justify;">
Pilâtre iría montado en una galería circular alrededor del cuello del globo, y no en una cesta, así que su peso tenía que ser equilibrado por un segundo aeronauta en el lado opuesto de la galería. D'Arlandes se convirtió, por tanto, no sólo en el primer copiloto, sino en el primer balasto.</div>
<div style="text-align: justify;">
Más tarde publicaría un recuento muy lacónico de su histórico viaje, que los llevó volando bajo sobre los tejados de París durante unos 27 minutos. El Montgolfier se elevó inicialmente a 300 metros de altura, atravesó el Sena, y comenzó una lenta deriva sobre los tejados de Saint-Germain, evitando por poco las torres del Saint-Sulpice, elevándose de nuevo sobre el parque de Luxemburgo, y finalmente desplomándose rápidamente hacia las Buttes aux Cailles (cerca de la actual Place d'Italie, en el XIII Distrito).</div>
<div style="text-align: justify;">
Por la estructura circular de la galería, con el brasero y el cuello del globo en el centro, los pilotos apenas pudieron verse el uno al otro durante el vuelo. Pilâtre pasó gran parte del tiempo gritándole a un d'Arlandes invisible para él que dejase de admirar el paisaje de París y se dedicase a alimentar el fuego: "¡Vamos! ¡Vamos! ¡Si se queda embobado mirando al Sena, acabaremos nadando en él!".</div>
<div style="text-align: justify;">
De hecho, d'Arlandes iba experimentando un pánico creciente (y tenía sus razones). Primero imaginó que el globo se había incendiado, luego que la tela se estaba separando de la galería, y finalmente que los cordajes del globo se iban soltando, uno a uno. No paraba de suplicarle a gritos al piloto: "¡Tenemos que aterrizar! ¡Tenemos que bajar ahora mismo!" Cuando un golpe de viento agitó el globo sobre Les Invalides, le chilló a Pilâtre "¿Pero qué hace? ¡Deje de bailar!".</div>
<div style="text-align: justify;">
Muchos testigos declararon más tarde que podían oir a los dos hombres gritarse mutuamente mientras pasaban sobre sus cabezas. Asumieron que estarían describiendo las glorias del vuelo.»</div>
<div style="text-align: justify;">
<br />
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"><sup>(1)</sup></span></span></span></span></span></span><span style="font-size: x-small;"> Lo que he hecho con este fragmento del libro, he de reconocerlo, no es tanto una traducción como una apropiación indebida, a medio camino </span><span style="font-size: x-small;"><span style="font-size: x-small;"><span style="font-size: x-small;">entre</span></span> una traducción <i>comme il faut</i> </span><span style="font-size: x-small;"><span style="font-size: x-small;">y una narración independiente de la historia. </span> Sirva esta nota al pie para pediros perdón y
recomendaros que leáis el libro original, si no por la elegancia de las
semblanzas de los principales científicos ingleses de finales del XVIII</span><span style="font-size: xx-small;"><sup>(2)</sup><span style="font-size: x-small;">, por el capítulo dedicado a la invención y la historia temprana del globo, que se lee como una novelita independiente, fresca y entretenida.</span></span><br />
<span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: x-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"><sup>(2)</sup></span></span></span></span></span></span> Me ocurre también </span></span><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: x-small;">—supongo que, puestos a caer en las notas al pie, <i>in for a penny, in for a pound</i></span></span><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: x-small;">— que gran parte del libro sucede en la Inglaterra del rey Jorge, el contrapunto exacto de los Estados Unidos de Hamilton </span></span><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: x-small;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: x-small;">—<i>fully armed batallion to remind you of my love</i>, &c</span></span></span></span><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: x-small;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: x-small;">—</span></span>. No es una fiebre que me haya cogido con mucha fuerza, pero me sorprendo visualizando involuntariamente algunos pasajes con los protagonistas del musical, lo cual no deja de ser un pequeño placer añadido.</span></span><br />
<span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: x-small;">Por ejemplo, otro de los pioneros de los vuelos en globo, el italiano Vincenzo Lunardi, en una ocasión escandalizó a un salón de té al proponer un brindis en honor a si mismo: "<i>I give you me, Lunardi, <a href="https://youtu.be/47ZAQby67lA?t=30s"><b>whom all the ladies love</b></a></i>".</span></span></div>
Noéhttp://www.blogger.com/profile/01510460993976112884noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2389922737459113578.post-21267108044979664092016-06-06T02:40:00.002+02:002018-09-22T15:32:40.338+02:00"@nramalleira mola"<div style="text-align: justify;">
Se me ocurrió buscar ayer en Twitter "@nramalleira mola" (no en un ataque de egolatría, sino por recuperar una conversación sobre el Kickstarter del juego estructural Mola Model). Por supuesto, no encontré lo que estaba buscando, sino una lista exhaustiva de todas las cosas que me han molado en Twitter desde que abrí cuenta, hace unos cuatro años. Y es espantosamente larga:</div>
<div style="text-align: justify;">
La historia de la sonda Akatsuki, y la de la ISEE-3. El proyecto TARDiS, incluído su nombre. El edificio Bradbury. "<a href="https://mastermind.atavist.com/"><i><b>The Mastermind</b></i></a>". Los ascensores Paternoster (o bien <b><a href="http://99percentinvisible.org/article/paternoster-lifts-cyclic-chain-elevators-no-buttons-doors-stops/">este artículo sobre ellos en </a><i><a href="http://99percentinvisible.org/article/paternoster-lifts-cyclic-chain-elevators-no-buttons-doors-stops/">99% Invisible</a></i></b>, no lo tengo claro). <b><a href="http://99percentinvisible.org/"><i>99% Invisible</i></a></b> en general (dos veces). <a href="http://www.radiolab.org/"><b>Radiolab</b></a> en general (dos veces). Estos <a href="http://99percentinvisible.org/episode/longbox/"><b>dos</b></a> <b><a href="http://99percentinvisible.org/episode/episode-86-reversal-of-fortune/">capítulos</a></b><i> </i>en particular de<i> 99% Invisible</i>, <b><a href="http://www.radiolab.org/story/galapagos/">este</a></b> de Radiolab, y, a saber por qué, "[una] señora que sale" en <b><a href="http://www.radiolab.org/story/darkode/">este otro</a></b>.</div>
<div style="text-align: justify;">
<b><a href="http://www.thisamericanlife.org/radio-archives/episode/452/poultry-slam-2011">El episodio</a></b> de <i>This American Life</i> en el que hablan de un extremeño que hace foie gras. <a href="http://www.futilitycloset.com/category/podcast/"><b><i>Futility Closet</i></b></a>. "<i>The Thrilling Adventures of Lovelace and Babbage</i>", de Sydney Padua, <b><a href="http://thrillingadventurehour.com/"><i>The Thrilling Adventure Hour</i></a></b> y su <b><i><a href="https://nightvale.bandcamp.com/album/thrilling-adventure-hour-welcome-to-night-vale-live-in-san-diego">crossover</a></i></b> con <i>Welcome to Night Vale</i>.</div>
<div style="text-align: justify;">
Sydney Padua, Ed Yong, Hank Green, Cliff Stoll, Ander Izagirre y <b><a href="http://gentedigital.es/comunidad/anderiza/2014/10/07/una-leccion/">esto</a> </b>que contó en su blog, Connie Willis,
Ruth Wilson en "Luther", Octavio Domosti, dos veces John Finnemore, John Oliver, "y, por elevación, <i>Footlights </i>en general".</div>
<div style="text-align: justify;">
Catástrofe Ultravioleta, y en concreto el primer cuarto de hora de su capítulo "<b><a href="http://catastrofeultravioleta.com/04-morgan/">Morgan</a></b>". <i>The Horne Section</i>. Notas de cine, Pretérito Imperfecto, La Script, Sofá Sonoro, y la sección
de Alfonso Cardenal en el Hora 25 del 24 de enero de 2014. Tapia de Casariego, la historia del apellido Japón, <b><a href="https://vimeo.com/14985356">este vídeo</a></b>,<b> </b>las webs <i><a href="http://publicdomainreview.org/"><b>The Public Domain Review</b></a></i> y <a href="https://www.brainpickings.org/"><b><i>Brain Pickings</i></b></a>, <a href="https://www.brainpickings.org/2014/02/07/dreadnought-hoax-virginia-woolf/"><b>un artículo</b></a> sobre la broma del Dreadnought y <b><a href="https://vimeo.com/53286941">un vídeo</a> </b>de Kurt Vonnegut que encontré en la segunda e, inevitablemente, también el <b><a href="http://molamodel.com/">Mola Model</a></b>.</div>
<div style="text-align: justify;">
Seguir en Twitter a <a href="https://twitter.com/Daurmith"><b>@Daurmith</b></a><b>, </b><a href="https://twitter.com/Daurmith/status/618830793843019776"><b>este hilo suyo</b></a> sobre el Google Deep Dream, <a href="http://daurmith.blogalia.com/historias/75702"><b>este texto</b></a>, su libro (y más tarde la
portada, por separado), y que en una ocasión le llamasen escritora. Que Mariana se abriese cuenta en Twitter, que mi primo Javier oiga listas de Spotify de mi prima Noelia, "coger un ejemplo que claramente apunta en un sentido y razonarlo en el contrario", y que "a la hora de buscarme regalos, la gente me visuali[ce] como un profesor de Oxford de los 50". </div>
<div style="text-align: justify;">
"<b><a href="https://www.youtube.com/watch?v=KXBI2_zH9Js"><i>The curse</i></a></b>", "<a href="https://play.spotify.com/album/65KwtzkJXw7oT819NFWmEP?play=true&utm_source=open.spotify.com&utm_medium=open"><b><i>The Race for Space</i></b></a>", la sesión de Dr. John en Ultrasonic Studios, la banda sonora de "<i>Cowboy Bebop</i>", y esta <b><a href="https://www.youtube.com/watch?v=sGwi8j0lb-4">versión</a></b> de "<i>Seven Nation Army</i>" hecha por C. W. Stoneking.</div>
<div style="text-align: justify;">
<a href="https://www.youtube.com/watch?v=Ztc6QPNUqls"><b>Este vídeo</b></a> de Veritasium, la parte de <a href="https://www.youtube.com/watch?v=9xBxhgMkETU"><b>este</b></a> de Emilie Graslie que trata sobre acacias, <b><a href="https://www.youtube.com/watch?v=ntQ7qGilqZE&feature=youtube_gdata_player">este</a></b> de una bola de agua en gravedad cero, y también otro de "<i>It's OK to be smart</i>" que ahora es privado o ha desaparecido.</div>
<div style="text-align: justify;">
Molan un artículo de Juan Tallón en "El Progreso" cuyo enlace está roto, una
frase tuiteada por <b><a href="https://twitter.com/JorgeMartnez12">Jorge Martínez</a></b> que después borró, dos momentos perdidos de la ceremonia de inauguración de los JJOO. de Londres, un doodle antiguo de
Google y la historia que no recuerdo de una canción.<b> </b></div>
<div style="text-align: justify;">
<a href="http://cultura.elpais.com/cultura/2014/07/29/actualidad/1406656165_078005.html"><b>Este artículo</b></a> y <a href="http://sociedad.elpais.com/sociedad/2014/07/04/actualidad/1404481682_674949.html"><b>este reportaje</b></a>, ambos de Jacinto Antón. <a href="http://elpais.com/elpais/2013/07/30/eps/1375186374_543879.html"><b>Este otro</b></a>, que sorprendentemente no lo es, y<b> <a href="http://ccaa.elpais.com/ccaa/2012/11/30/andalucia/1354297613_506679.html">esta noticia</a></b>. <a href="http://economia.elpais.com/economia/2012/11/16/actualidad/1353070278_126633.html"><b>Un reportaje</b></a> de Guillermo Abril sobre portacontenedores. "<a href="https://thenib.com/what-to-pack-for-certain-death-11cc8f343f31#.4zrlooppa"><b><i>What to pack for Certain Death</i></b></a>", de Emi Gennis, "<a href="http://twitpic.com/ccqiwa"><b><i>The street Tom Waits grew up on</i></b></a>", de Tom Gauld, y "<a href="http://www.mcsweeneys.net/articles/as-the-token-female-member-of-this-action-adventure-team-my-job-is-to-kick"><b><i>As the token female member of this action-adventure team, my job is to kick</i></b></a>", de Juliana Gray.</div>
<div style="text-align: justify;">
Mola que Manu Leguineche hubiese escrito una biografía de Thesiger, que los Ben Folds Five tengan un disco llamado "<i>The Unauthorized Biography of Reinhold Messner</i>", que Xabier Fortes sea hermano del autor de un libro sobre piratería en las Rías Baixas. Por último, molan <b><a href="https://twitter.com/nramalleira/status/465971647519141890">la versión italiana del título</a></b> de "<i>Fortunately the Milk"</i>, el "apellido" de Rafa Cabeleira, el tumblr de Pablo Tilve, <a href="http://coctel-de-ciencias.blogs.quo.es/2011/10/14/aterriza-como-puedas-version-espacial/"><b>esta historia</b></a> que contaba América Valenzuela en Quo, <a href="http://ww2.odu.edu/ao/instadv/quest/MetroMurder.html"><b>esta otra</b></a>, las películas "<i>Skyfall</i>" y "<i>Looper</i>", las series "<i>Community</i>" y "<i>The Great Train Robbery</i>", y la palabra "judeomasón".</div>
Noéhttp://www.blogger.com/profile/01510460993976112884noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2389922737459113578.post-11353653352536322732016-04-28T03:31:00.001+02:002017-01-21T22:33:34.983+01:00"Ladran, Sancho, luego cabalgamos"<div class="js-tweet-text-container">
<div class="TweetTextSize js-tweet-text tweet-text" data-aria-label-part="0" lang="es" style="text-align: justify;">
Aparte de que no sea una cita del Quijote y por tanto Sancho no pinte nada en ella, no entiendo la premisa de la frase "ladran, luego cabalgamos".</div>
<div class="TweetTextSize js-tweet-text tweet-text" data-aria-label-part="0" lang="es" style="text-align: justify;">
Para que tenga sentido hay que admitir que el Quijote y Sancho están cabalgando, pero de alguna manera no lo saben. Y me pregunto cómo es posible. No parece complicado discernir, por empezar por alguna parte, si tienen o no un caballo debajo, y una vez que han obtenido esa información y están razonablemente seguros de ella, fijarse por ejemplo en si todas las cosas a su alrededor parecen estar moviéndose a la vez.<br />
Pero en fin, sea: es una noche sin estrellas, sus monturas están siendo extremadamente sigilosas, y no tienen ninguna referencia externa con la que guiarse. Son como un árbol en el medio de un bosque que nadie sabe si está caído o no, salvo el
gato que oyó el golpe desde dentro de la caja y a la vez no lo oyó en absoluto porque está muerto y el árbol no existe y además Sancho en realidad ni siquiera es Sancho porque esa frase no sale en el libro.<br />
Pero unos ladridos rompen de pronto el silencio infinito de la noche, cogiéndolos desprevenidos y asustando imperceptiblemente a sus caballos. Y solo porque oyen a los perros, con una agilidad mental que francamente llevaba faltándole toda la noche, deduce el Quijote que algo han debido de cabalgar, después de todo.<br />
Interpretar cuando un perro ladra que sólo puede significar que has llegado a caballo a su territorio es aventurado. Mi perro le ladra a los limones de mi finca porque quiere jugar con ellos. Por supuesto, bien pensado, el Quijote es por definición ridículamente optimista, así que lanzarse a conclusiones de ese estilo es propio del personaje.<br />
Y aún dando por bueno su razonamiento, me sigue molestando el problema de que no sepan si se han movido o no. Parece ser imposible detectar su avance de un modo directo y tienen que fiarse de métodos externos, como la opinión de los perros. Esto me hace pensar que su avance ha sido mínimo, que están tan lejos de su objetivo que en realidad poco más da que hayan avanzado o no.<br />
¿Y qué hacen fuera de la posada en medio de la noche? Uno se espera esas insensateces del Quijote, que posiblemente esperaba avanzar leguas y leguas sin darse cuenta, pero ¿por qué Sancho se ha dejado arrastrar, en la noche cerrada, cuando lo más probable es que se pierdan?<br />
De hecho, es posible que el Quijote tenga razón y se hayan movido, pero en la dirección equivocada. Tal vez con la luz de la mañana se den cuenta de que tienen enmendar el rumbo, después de toda la noche sin dormir.<br />
Existe, por supuesto, otra explicación: que en realidad el avance sea lo de menos, y que cuando el Quijote le pidió a Sancho que saliese de su catre y lo siguiera, ya supiese que no llegarían a ninguna parte, que no entenderían si estaban ganando terreno o no, que no había ningún objetivo en el horizonte, y lo único que pretendiese fuera, precisamente, despertar a los perros para dar impresión de movimiento, aunque fuese a costa de engañar a Sancho y cansar inutilmente a los caballos. </div>
</div>
Noéhttp://www.blogger.com/profile/01510460993976112884noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2389922737459113578.post-74215525826303063582016-04-26T01:19:00.000+02:002016-12-13T15:57:23.633+01:00Zzyzx<div style="text-align: justify;">
Zzyzx fue el sueño de un emprendedor llamado CH Springer, que lo fundó en 1944 y le dedicó 30 años de su vida. Llegó a contar con hotel, spa, estación propia de radio e incluso un lago artificial. Toda esta prosperidad acabó abruptamente cuando se lo arrebató el gobierno federal.</div>
<div style="text-align: justify;">
Springer se había dedicado desde su juventud a dar conferencias de ciudad en ciudad, haciéndose pasar por doctor<span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: x-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"><sup>(1)</sup></span></span></span></span></span></span> con credenciales inventadas de universidades ficticias, para vender en ellas tónicos y ungüentos. En algún momento se ordenó a si mismo pastor de <a href="http://youtu.be/7y1xJAVZxXg">alguna iglesia imprecisa</a> y comenzó a llamarles sermones en lugar de conferencias, lo cual hacía más fácil pasar el cepillo y pedir donaciones. Además, en calidad de predicador, consiguió un espacio de 4 horas diarias en una cadena de radios evangélicas, que utilizaba para hacerse publicidad.</div>
<div class="bubble" style="text-align: justify;">
<div class="content" data-bind="template: { name: contentTemplate, data: $data }, attr: { id: $data.contentId }" id="msg_15839273874198680510">
<div data-bind="html: content, css: typeClasses, visible: !translationItem.visible()">
<div style="text-align: justify;">
Pero el hombre quería más. Tenía el sueño de fundar un pueblo balneario, como el Battle Creek de Kellogg (aunque sin mutilaciones genitales infantiles<span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: x-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"><sup>(2)</sup></span></span></span></span></span></span>, lo cual es un punto a su favor), y lo persiguió con ahínco durante casi doce años. Fundó, con ayuda de sus feligreses, varios balnearios y casas de descanso en Maryland, Iowa y Pennsylvania; desafortunadamente tuvo que acabar cerrándolas, una tras otra, porque tenía la costumbre de no pagar impuestos.<br />
Tras esa serie de fracasos dio un giro radical a su vida y decidió mudarse a California, donde presentó una solicitud al Gobierno por los derechos de explotación minera de una parcela del desierto del Mojave.<br />
<div style="text-align: center;">
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</div>
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<br />
¿Conocéis
la metáfora de la montaña de Neil Gaiman?<br />
Cuando estaba
comenzando a escribir se dio cuenta, como muchos otros, de que era incapaz de escribir al nivel que se exigía a si mismo; tenía que practicar mucho antes de ser un buen escritor.<br />
Gaiman se convenció de que su objetivo, escribir bien, era como una montaña que veía desde lejos, recortándose en el horizonte, al principio de una larga caminata.<br />
No estaba obligado a darse prisa en llegar, así que se dedicó durante años al periodismo, e incluso escribió un libro sobre un grupo de moda; pero se prometió que mantendría siempre su montaña a la vista, y que solo tomaría las decisiones profesionales que lo
acercasen a ella. En algún momento le ofrecieron ser editor de una revista —era un buen trabajo, con un buen sueldo—, pero lo rechazó porque lo que le interesaba era escribir sus propias historias.<br />
Vista desde fuera, la vida de Springer no se parece en nada a ese camino ordenado hacia un objetivo final que aconseja Gaiman. Había sido profesor universitario, médico,
predicador, empresario hostelero fracasado; había ido cambiando de ruta, tomando atajos equivocados, pegando bandazos espectaculares por todo el Midwest americano, y ahora tocaba su salto más extraño: minero en California.<br />
El balneario, la montaña soñada al final de su camino, nunca había parecido tan lejana.<br />
Y sin embargo, el principio que lo dirigía era el mismo. Sabía que era capaz de ganarse la vida con su labia y su carisma, y nunca se dejó tentar por la comodidad de la vida burguesa. Nunca había sido doctor ni universitario, y tampoco pretendía ponerse ahora a buscar oro. En cuanto le dieron la concesión se olvidó de la minería, se frotó las manos al ver que le habían cedido el control de una parcela de casi 50 kilómetros cuadrados, y fundó un balneario. </div>
Para construirlo, su iglesia ofreció caritativamente refugio a indigentes de Los Ángeles, a los que enviaba a su campamento en mitad del desierto y les pedía como compensación por su misericordia que ayudasen en las obras. Por tan buena labor, además de mano de obra gratuita, obtuvo exenciones fiscales.<br />
En pocos meses acabó el hotel-balneario, "un retiro espiritual en tierra de Dios" al que llamó Zzyzx para asegurarse de que fuese "<i>the last word on health</i>" en las guías telefónicas<span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: x-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"><sup>(3)</sup></span></span></span></span></span></span>. Después llegaron la radio, desde la que siguió predicando y anunciando sus productos en shows que llegó a sindicar a 400 radios regionales; las termas falsas —en realidad una piscina con calentadores en el fondo—, la iglesia, el lago artificial y el castillo, en el que modestamente vivió durante 29 años, hasta que al gobierno se empezó a preguntar qué tal le iría con su mina. </div>
</div>
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<div data-bind="html: content, css: typeClasses, visible: !translationItem.visible()">
<br />
<span style="font-size: small;">REFERENCIAS Y ENLACES</span>
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: small;">"<a href="http://www.maximumfun.org/sawbones/sawbones-king-quacks"><i>The King of Quacks</i></a>", en <i>Sawbones<sup></sup></i></span><span style="font-size: small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: x-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"><sup></sup></span></span></span></span></span></span><i>.</i></span><br />
<span style="font-size: small;">"<i><a href="https://www.youtube.com/watch?v=91rdB5fDMaA">Curtis Springer's last appearance at Zzyzx</a></i>"<i> </i></span></div>
<span style="font-size: small;"><span lang="EN-US">"<i><a href="https://youtu.be/plWexCID-kA">Make good art</a></i>", de Neil Gaiman.</span></span><br />
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: x-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"><sup>(1)</sup></span></span></span></span><span style="font-size: xx-small;"> En el <a href="https://res.cloudinary.com/roadtrippers/image/upload/w_640,fl_progressive,q_60/v1427411895/preuxvhzvr0viu0n9bhy.jpg">cartel </a>de una conferencia en 1933, por ejemplo, se presenta como "<i>Curtis Howe Springer M.D., N.D., D.O., Ph.D., honorarily conferred</i>".</span></span></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: x-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"><sup>(2)</sup></span></span></span></span><span style="font-size: xx-small;"> Cuentan en <a href="http://www.maximumfun.org/sawbones/sawbones-john-kelloggs-odd-prescription"><i>Sawbones</i></a> que Kellogg era un firme defensor de la abstinencia, hasta el punto de haber dejado escrito que "ni la peste, ni la guerra, ni la viruela (...) han sido tan desastrosas para la Humanidad como el pernicioso vicio del onanismo". Uno de los métodos que proponía para evitar el mal de la masturbación era quemar con ácido fénico el clítoris de las niñas.</span></span></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;">También era partidario de la eugenesia y la separación de las razas; y de los enemas diarios de yogur, <i>oddly enough</i>.</span></span></span><br />
<span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: x-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="font-size: xx-small;"><sup>(3)</sup></span></span></span></span><span style="font-size: xx-small;"> Esto me recuerda la historia de la familia neoyorquina que lleva 60 años persiguiéndose por la guía telefónica.<br />Sam y Dave Krasilovsky montaron una empresa de transportes y guardias jurados, "<i>Sam Krasilovsky & Bro.</i>", y contrataron en ella a su sobrino Mike. El negocio les iba bien, pero Mike era ambicioso</span></span></span></span></span></span><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;">:</span></span></span></span></span></span></span></span></span></span></span></span> no se conformaba con trabajar para sus tíos y </span></span></span></span></span></span><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;">quería entrar en el negocio a las cajas fuertes</span></span></span></span></span></span></span></span></span></span></span></span></span></span></span></span></span></span>; en cuanto pudo, se estableció por su cuenta </span></span></span></span></span></span><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;">.</span></span></span></span></span></span><br />
<span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;">En un gesto no muy elegante, al independizarse se cambió el apellido de Krasilovsky </span></span></span></span></span></span><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;">con v a Krasilousky con u, de manera que su compañía quedaba justo por delante de la de sus tíos en el listín. El éxito que tuvo con esa maniobra hizo que su primo Milton se animase a montar también su propio negocio, "Transportes 'Mick' Krasilousky"; poco después, los tíos Sam y Dave les tomaron la delantera a ambos al cambiarse a su vez el apellido a Krasilosky. En este punto, probablemente un tanto frustrado, Krasilousky (Mike, no Mick) decidió poner tierra de por medio y fundó una subsidiaria de su empresa a la que llamó "<i>Atlas-Krasilousky</i></span></span></span></span></span></span><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><i> Safe Co</i>"; </span></span></span></span></span></span>pero menos de un año después sus tíos habìan creado la "<i>Acme Safe Co., Division of S. Krasilovsky and Bros.</i>"</span></span></span></span></span></span><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"> —</span></span></span></span></span></span>no, por cierto "<i>S. Krasilosky</i>"</span></span></span></span></span></span><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;">—</span></span></span></span></span></span>, y estaban de nuevo justo por encima de él.<br />Más tarde llegó una nueva generación de primos a aumentar la competencia y complicar todavía más el asunto. Marvin Krasilovsky fundó la </span></span></span></span></span></span><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;">"<i>AAA Acme-Krasilovsky Safe Company</i>". Su primo </span></span></span></span></span></span>Monroe </span></span></span></span></span></span><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;">—</span></span></span></span></span></span>Krasilovsky, </span></span></span></span></span></span><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;">hermano de 'Mick' (no Mike) Krasilousky</span></span></span></span></span></span><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;">—, que tuvo la lucidez de pensar que los clientes iban a acabar hartándose del crucigrama que habían montado, fundó otra, pero le puso "<i>Empire Safe</i>".</span></span></span></span></span></span><br />
<span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;">Con el tiempo, todas las empresas nombradas con alguna variante del apellido empezaron a perder dinero, y así que los Krasilovskys fueron poco a poco siguiendo el ejemplo de Monroe y escogiendo marcas comerciales que no mencionasen a la familia.</span></span></span></span></span></span><br />
<span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;">Aún así, trasteando en Google, he encontrado la "<i>AAA Acme Krasilovsky Safe Co.</i>" y la "<i>Krasilovsky Div. of Acme Safe Company</i>". Aparecen listadas en la web de las páginas amarillas con la misma dirección.</span></span></span></span></span></span><br />
<span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: 10.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: xx-small;"></span></span></span> </span></span></span></div>
</div>
</div>
</div>
Noéhttp://www.blogger.com/profile/01510460993976112884noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2389922737459113578.post-41122670761615276212016-04-04T18:57:00.001+02:002016-10-04T12:54:40.655+02:00Sobre "The marriage plot", de Jeffrey Eugenides<div style="text-align: justify;">
En un momento de "<i>The marriage plot</i>", alguien escucha el inverosímil nombre de uno de los protagonistas, Mitchell Grammaticus, y la primera pregunta que le viene a la cabeza es si es descendiente de griegos.<br />
Es un trozo suelto de diálogo, sin mayor importancia en la trama, pronunciado por un personaje irrelevante; pero lo recuerdo porque al leerlo me pareció un fallo ridículo del escritor que Grammaticus le sonase a su personaje, a primer golpe de oído, como un apellido griego.<br />
Para empezar —merece la pena decirlo— porque no suena ni por asomo a un apellido real; pero en todo caso, entre la "m" doble y la "u" de la sílaba final, Grammaticus no tiene la forma típica de los apellidos griegos.</div>
<div style="text-align: justify;">
A lo que que se parece el nombre de Mitchell Grammaticus —protagonista oculto del libro, brújula moral de la historia—, hasta el punto de replicar el patrón de sílabas y acentos, es a otro nombre, este sí claramente griego al primer golpe de oído, al cual supongo que vino a sustituir muy tarde en el proceso de edición, cuando el diálogo en el que tanto chirría ahora estaba consolidado y no había manera de cambiarlo; y está claro una vez que lo piensas y por supuesto que está en todo su derecho de hacerlo, pero es hasta triste que lo haya hecho de una forma chapucera y resulte tan evidente.<br />
A lo que se parece "Mitchell Grammaticus", quiero decir, es a "Jeffrey Eugenides".</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
Noéhttp://www.blogger.com/profile/01510460993976112884noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2389922737459113578.post-70333056551442707752016-03-27T00:24:00.000+01:002017-03-09T13:30:57.017+01:00I wanna be your Maria Popova #6<div style="text-align: justify;">
Si hubiésemos seguido publicando con regularidad, este boletín habría salido el 20 de diciembre, día de las elecciones.<br />
Tenía previsto aprovechar la ocasión para enlazaros este perfil en el
Times de Justin Trudeau, el nuevo primer ministro de Canadá, que me
produce cierta curiosidad: <b><a href="http://www.nytimes.com/2015/12/13/magazine/trudeaus-canada-again.html?_r=0" target="_blank"><i>Trudeau's Canada, again</i></a></b>, por Guy Lawson.<br />
Aunque, en realidad, sería únicamente una excusa para enseñaros luego <b><a href="https://youtu.be/XuSpZ3_5pTc" target="_blank">el vídeo del combate de boxeo</a></b> que se menciona en el texto.<br />
Es un mero acto publicitario, con una excusa forzada, entre dos
políticos de un país no muy importante; y sin embargo merece la pena
porque es una máquina narrativa perfecta: hay un malo y un bueno, los
comentaristas están en contra del bueno y lo subestiman, el malo es feo,
el bueno empieza perdiendo... El final casi me provoca lágrimas de
emoción y puñetazos al aire. Me recuerda, por cierto, a esto: <b><a href="http://www.radiolab.org/story/153810-winning-side/" target="_blank"><i>On the winning side</i></a></b>, en Radiolab.<br />
(Sobre ese capítulo de Radiolab, y sabe dios cuántas más cosas, escribí desordenadamente una serie de textos que voy a enlazar <b><a href="http://tiporaretto.blogspot.com.es/2015/02/el-milagro-de-stevenson-en-lugo.html" target="_blank">aquí</a></b>, entre paréntesis).
</div>
<div style="text-align: center;">
____</div>
<div style="text-align: justify;">
<br />
De entre los múltiples repasos a lo mejor de 2015 que he visto —en lugar de escribir este boletín—, al que más vuelvo es al de<b> <i><a href="http://www.npr.org/sections/allsongs/2015/12/02/458038833/all-songs-considered-the-year-in-music-2015" target="_blank">All songs considered</a></i></b>.
Solo conocía dos de las canciones y tres o cuatro de los artistas, y
llevo dos semanas yendo y viniendo de él. También han hecho, a
principios de enero, <b><a href="http://www.npr.org/sections/allsongs/2016/01/06/462053248/16-number-one-songs-from-our-first-16-years" target="_blank">un repaso</a></b>
a los 16 años de vida del programa, que me puso ridículamente melancólico por 2001 y 2002 pero me descubrió
otro puñado de canciones y grupos que no me sonaban de nada.<br />
Creo que tuve una especie de crisis de mediana edad musical a los 24, en
la que decidí que toda la música que me iba a interesar estaba ya
hecha; es posible que me equivocase.<br />
Por otra parte, hace mucho que no veo en una misma semana dos cosas tan propias de finales de los 90 como el <a href="https://youtu.be/mhyD2qchkEw" target="_blank"><b><i>Tiny desk</i> de Sylvan Esso</b> </a>y <b><a href="https://youtu.be/H6SIw30IOt8" target="_blank"><i>Sprinter</i></a></b>,
de Torres. Igual no soy yo el que está volviendo a la música, sino que
la música actual la que está volviendo a géneros de mi época.
</div>
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_____</div>
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<br />
Otro de los podcasts que más escucho habitualmente, y que cumple una función similar a <i>All songs considered</i>
(siendo esa función, muy específicamente, llenarme de ganas de
investigar cosas interesantes en internet cuando estoy en el trabajo),
es el de <b><i><a href="http://longform.org/podcast" target="_blank">Longform</a></i></b>.<br />
Es un programa de entrevistas a periodistas en las que hablan de sí
mismos y de su carrera, así que lo más probable es que no os interese a
todos.<br />
Os recomiendo, sin embargo, que escuchéis el episodio de <b><a href="http://longform.org/posts/longform-podcast-129-rukmini-callimachi-part-1" target="_blank">Rukmini Callimachi</a></b>, en el que explica la estrategia de comunicación de ISIS, y
su relación con sus fuentes dentro de la organización.<br />
Como término general las entrevistas de Longform no merecen tanto la
pena, salvo para aquellos fascinados como yo por oír a escritores
hablando de escribir. Pero los presentadores parecen genuinamente
entusiasmados por los reportajes de sus entrevistados, y dan ganas de
leerlos. Por ejemplo, la entrevista de<b> <a href="http://longform.org/posts/longform-podcast-74-jon-mooallem" target="_blank">Jon Mooalem</a></b> me hizo leer este texto sobre <b><a href="http://www.nytimes.com/2006/10/15/magazine/15pigeons.html?pagewanted=2&n=Top/News/Science/Topics/Birds&_r=1&" target="_blank">palomas en Hollywood</a></b>, y me recordó esta historia maravillosa de hipopótamos y espías en los pantanos de Louisiana: <b><a href="https://magazine.atavist.com/stories/american-hippopotamus/" target="_blank"><i>American Hippopotamus</i></a></b>, por Jon Mooallem. (Es larguísimo, como casi todos los reportajes de The Atavist; si no tenéis vacaciones también podéis oír <b><a href="https://soundcloud.com/atavistmagpodcast/american-hippopotamus-episode-1" target="_blank">aquí</a></b> el podcast).<br />
También, a raíz de la entrevista a Dan P. Lee leí su<b> <a href="http://www.vulture.com/2012/06/hiding-out-with-fiona-apple-musical-hermit.html" target="_blank">perfil de Fiona Apple</a></b>. Según lo iba leyendo recordaba <b><a href="http://www.spin.com/2008/01/lenny-kravitz-virgin-again/" target="_blank">el perfil de Jonathan Ames sobre Lenny Kravitz</a></b> (sin saber que Fiona Apple y Jonathan Ames habían salido juntos, lo cual es extrañamente coherente).
</div>
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<br />
Y nada más por aquí. Mariana me dijo que la cubriese un par de meses y
lo he hecho a base de no publicar nada, que es una manera extraña de
mantener un boletín, <i>admittedly</i>. Pero es de esperar que vuelva dentro de poco, y esto empiece a ser más regular y menos logorreico.</div>
Noéhttp://www.blogger.com/profile/01510460993976112884noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2389922737459113578.post-45232334127070815642016-03-20T00:23:00.000+01:002017-09-05T13:04:29.171+02:00I wanna be your Maria Popova #5<div style="text-align: justify;">
Andamos bajo mínimos en la redacción de iwbymp, incumpliendo promesas y
llegando tarde a las citas; por faltar, para ser honestos, nos falta incluso la redacción.<br />
Mariana sigue ocupada y yo estoy en un pueblo perdido de Arkansas,
tropezando con vacas y desesperado por reconciliar mi anglofilia, mi envaramiento y mi esnobismo liberal con estar a centenares de millas bajo la Mason-Dixon, en un pueblo cuyo único bar tiene la bandera confederada encima de la puerta
y un retrete que probablemente doble funciones como lavamanos.<br />
Estoy, quiero decir, tratando de aferrarme a cualquier cosa que me haya gustado y sean
genuinamente americanas, e idealmente tengan relación con este pueblucho, por
tenue que sea.</div>
<div style="text-align: justify;">
Por ejemplo, me ha supuesto una sorprendente alegría releer un texto de Maciej Ceglowski sobre la zona de riesgo sísmico de New Madrid, que está a 100 kilómetros aquí. <b><a href="http://www.idlewords.com/2015/07/confronting_new_madrid.htm"><i>Confronting New Madrid</i></a></b>, en <i>Idle Words</i>.</div>
<div style="text-align: justify;">
Ceglowski es el creador del <b><a href="http://www.idlewords.com/2007/04/the_alameda_weehawken_burrito_tunnel.htm" target="_blank">Túnel de burritos Alameda - Weehawken</a></b>, y ha escrito mucho sobre <b><a href="http://www.idlewords.com/2010/03/scott_and_scurvy.htm" target="_blank">Scott y la Antártida</a></b>. El <i>motto </i>de su blog es "<i>brevity is for the weak</i>" y dio una <b><a href="http://idlewords.com/talks/web_design_first_100_years.htm" target="_blank">charla sensacional sobre la historia de la aviación y la del diseño de web</a></b>, en la que mezclaba ideas que pesaban igual u olían parecido. En general me cae bien.</div>
<div style="text-align: justify;">
Encontrar en su artículo una conexión entre mi vida de verdad y esta habitación de hotel ha sido levemente reconfortante —incluso menciona la acería de Nucor que hay a un par de kilómetros de aquí—; a la vez que preocupante, porque por supuesto la menciona para preguntarse cómo se enfocarán las labores de reconstrucción de las infraestructuras dañadas por el terremoto, cuando éste se lleve por delante la única acería de la zona. Hay varios saltos de nivel en la frase anterior, notaréis, varias capas metafóricas de escombros acumulándose una sobre otra.</div>
<div style="text-align: justify;">
Puestos a hablar de desastres geológicos que pueden pasar en Estados Unidos durante mi estancia, tengo el deber moral de citar el artículo de Kathryn Schultz en el New Yorker sobre la zona de subducción de Cascadia, que sumió a toda la ciudad de Seattle en sentimientos contradictorios muy similares a los míos: por una parte, Schultz se pregunta no ya si habrá un terremoto que destruya la ciudad, si no cuándo sucederá; pero por otro lado está tan bien escrito, de una manera tan fluida. <b><a href="http://www.newyorker.com/magazine/2015/07/20/the-really-big-one"><i>The really big one</i></a></b>, por Kathryn Schultz.<br />
<div style="text-align: center;">
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<br />
También está relativamente cerca de aquí Oxford, MS, cuna de la Oxford American, una revista que nació con la pretensión de ser la New Yorker del Sur (siempre hay alguna revista que pretende ser <a href="http://madrilanea.com/2012/03/16/entrevista-ricardo-gonzalez-jot-down/" target="_blank">la New Yorker de algún sitio</a>).<br />
El caso es que para la Oxford American escribe a veces Harrison Scott Key, autor de <a href="http://snapjudgment.org/friday-night-lights" target="_blank"><b>esta historia</b></a> en Snap Judgement (recomiendo que escuchéis el<b> <a href="http://snapjudgment.org/proxy" target="_blank">episodio completo</a></b>), y también de esto, por poner un ejemplo: <a href="http://www.oxfordamerican.org/magazine/item/221-fifty-shades-of-greyhound" target="_blank"><b><i>Fifty shades of Greyhound</i></b></a>, en Oxford American.</div>
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Además de eso, llevo dos semanas escuchando el disco más genuinamente americano que conozco: Hamilton, un musical rap sobre los padres fundadores de EEUU.</div>
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Está compuesto por Lin-Manuel Miranda, de quien merece la pena destacar que participó en el<b> <a href="http://www.thisamericanlife.org/radio-archives/episode/528/the-radio-drama-episode" target="_blank">episodio musical de <i>This American Life</i></a></b>, que escribió el <a href="https://youtu.be/4CR-sAit8LE" target="_blank"><b>número final de una gala de los Tony</b></a> durante la propia gala, y que su boda fue <a href="https://youtu.be/KgZ4ZTTfKO8" target="_blank"><b>así</b></a>.</div>
<div style="text-align: justify;">
Como tengo pensado viajar algo durante los fines de semana, también he repasado algunos programas viejos de sofá Sonoro sobre <b><a href="http://play.cadenaser.com/audio/000WB0609220150620165814/" target="_blank">Memphis</a></b> y <a href="http://play.cadenaser.com/audio/cadenaser_sofasonoro_20150613_150000_160000/" target="_blank"><b>Nueva Orleans</b></a>, y el <a href="http://www.thisamericanlife.org/radio-archives/episode/565/lower-9-10" target="_blank"><b>reportaje de <i>This American Life</i> sobre el Katrina</b></a>.</div>
<div style="text-align: justify;">
Con todo esto, mal que bien, las cosas van empastando y me voy haciendo mi fortaleza, como decía García Madero.</div>
Noéhttp://www.blogger.com/profile/01510460993976112884noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2389922737459113578.post-92229688726620924542016-03-13T00:22:00.000+01:002017-11-12T22:26:33.910+01:00I wanna be your Maria Popova #4<div style="text-align: justify;">
Esta semana M. está muy ocupada y me ha dejado a mí a los mandos.
Como consecuencia casi inevitable, este boletín va a tener más texto que
enlaces y os llegará a última hora del domingo, <i>thus rendering it virtually useless</i>.
También estará salpicado indiscriminadamente con frases en inglés, la
mayor parte de las cuales serán gramaticalmente correctas. En fin,
empecemos:<br />
Un reportaje (larguísimo) sobre <i>travellers</i> de Limerick y cuernos de rinoceronte, en <i>The Atavist</i>:<i> </i><a href="https://read.atavist.com/dead-zoo-gang" target="_blank"><i><b>The</b> <b>Dead Zoo Gang</b></i></a>, por Charles Homans.<br />
Hablando de lo cual —aproximadamente, como siempre—, este reportaje merece mucho la pena: <b><i><a href="http://www.nationalgeographic.com/tracking-ivory/article.html" target="_blank">How killing elephants finances terror in Africa</a></i></b>, por Bryan Christy.<br />
Al leerlo, por cierto, he recordado esta historia en <i>The Moth</i>: <b><a href="http://themoth.org/posts/stories/unusual-normality" target="_blank"><i>Unusual normality</i></a></b>, por Ishmael Beah.</div>
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<br /></div>
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Tres años después, seguimos sin saber qué pasó en Chévaline. Una buena crónica aquí: <b><a href="http://www.gq.com/story/alps-murder-chevaline" target="_blank"><i>L'affaire de Chévaline</i></a></b>, por Sean Flynn.<br />
Una buena crónica puede ser mal periodismo, ¿no? Es decir, el reportaje
sobre Chévaline ordena los hechos y los resume, pero no descubre nada
nuevo. Aunque eso tampoco es mal periodismo, claro; mal periodismo sería
inventarse cosas. En todo caso, es algo distinto (y peor) a
este reportaje, por ejemplo: <b><a href="http://www.dagbladet.no/spesial/vatdraktmysteriet/eng/" target="_blank"><i>The wetsuitman</i></a></b>, por Anders Fjellberg.<br />
Hablando de cosas que no sabemos cómo sucedieron —<i>boy am I good at segueing</i>—,
esta semana, ha habido una nueva comisión parlamentaria sobre el ataque
a la embajada de Benghazi en 2012 (Hank Green lo explica muy bien en <b><a href="https://www.youtube.com/watch?v=btlqXbH1mCM" target="_blank">este vídeo</a></b>), y he recordado un capítulo de TLDR (el podcast del que nació el fenomenal <b><i><a href="https://gimletmedia.com/show/reply-all/" target="_blank">Reply All</a></i></b>, que aprovecho para recomendaros porque de esto se trata): <b><i><a href="http://www.onthemedia.org/story/tldr-11-rip-vile-rat/" target="_blank">RIP Vile Rat</a></i></b>, en TLDR.<br />
Por supuesto, tiene pinta de que la comisión parlamentaria tiene más que ver con las elecciones del año que viene que con saber exactamente qué
pasó aquel día.</div>
<div style="text-align: justify;">
Hablando de lo cual, también esta
semana ha retirado su campaña Lincoln Chaffee, <b><a href="https://youtu.be/-8MiYob_mL0" target="_blank">irrelevante</a></b> candidato a las primarias demócratas que probablemente solo protagonizó un artículo a nivel nacional en esta carrera: <b><i><a href="http://www.theatlantic.com/politics/archive/2015/10/lincoln-chafee-2016/412141/" target="_blank">Why did Lincoln Chaffee even run?</a></i></b>, por Molly Ball.</div>
Noéhttp://www.blogger.com/profile/01510460993976112884noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2389922737459113578.post-7249561344997293442016-03-07T11:10:00.002+01:002017-09-05T13:08:07.284+02:00Mad Max<div style="text-align: justify;">
Cualquier gallego conoce la fama del eucalipto: estropea el suelo, consume mucha agua, desprende tanta cáscara que nada crece bajo él, es una autopista para el fuego y de los primeros en recuperarse después. En el imaginario colectivo, el eucalipto es tirando a cabrón.<br />
El caso es que el otro día me encontré este párrafo en "<i>The Orchid Thief</i>":<br />
<blockquote class="tr_bq">
<i>There is even a grand champion of Florida's deathless plants. It's the melaleuca, a homely tree from Australia that was brought to the state in 1906 as an ornamental landscaping plant. Melaleucas grow to be fifty feet tall, and have spongy white bark, and look a little like a eucaliptus tree with long hair. They drink so much water that they can dry out an acre of wetlands a day, so they were also used to help drain what was then considered Florida's useless swampland. In the 1970s, real estate developers had melaleuca seeds scattered over the Everglades by plane. Melaleucas love living in Florida. Since their introduction, they have multiplied by the thousands. Ther spread at the rate of fifty acres a day. They have parched and then taken over a half million of the Everglades' 7.6 million acres. Melaleuca leaves are oily and burn intensely. A melaleuca-leaf fire in 1985 left two million people in Florida without electricity because the fueled-up flames burned as high as the main power transmission lines. No one has any sentimental feelings about the species, and most people now consider them as spreading evil. The problem is that melaleucas hate to die. If a melaleuca tree is frozen or starved or chopped or poisoned or broken or burned, it will release 20 million seeds right before it dies, and resow itself in every direction, so in essence it ends up more alive than dead. The trick is to kill the tree gradually, because the shock of dying is what causes it to shoot out its seed. The ranger who led me on my first walk on the Fakahatchee was a melaleuca murder expert. He said that a tiny, pudgy Australian weevil, known as the snout beetle, lives on melaleuca leaves and flower pods, and that 300 of them had been imported and released in the Everglades, in hope of down the melaleuca population. He said that, otherwise, the only way to kill the tree in a non-shock way is a method called hack-and-squirt. You hack a little bit of the tree, you squirt in just a little bit of herbicide, come back after a while and hack and squirt again, and keep hacking and squirting until the tree languidly dies.</i></blockquote>
¿A qué clase de torturas espartanas somete Australia a sus árboles? ¿Cómo los deja tan dañados, tan egoístas, asustadizos como monstruos en un país extraño, con tanto miedo a morir que al huir aplastan todo a su paso?</div>
Noéhttp://www.blogger.com/profile/01510460993976112884noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2389922737459113578.post-78392079734893433412016-03-06T00:13:00.000+01:002016-03-06T15:04:50.712+01:00I wanna be your Maria Popova #3<div style="text-align: justify;">
<br />
El domingo pasado se reeditó con el País un artículo muy bueno de Ander Izagirre en Jot Down sobre Chernobyl (<a href="http://www.jotdown.es/2014/02/no-sabiamos-que-la-muerte-pudiera-ser-tan-bella/" target="_blank">"<b>No sabíamos que la muerte pudiera ser tan bella</b>"</a>, por Ander Izagirre), y dos días después rebotó por muchos medios el resultado de un estudio sobre el <b><a href="http://www.theguardian.com/science/grrlscientist/2015/oct/05/what-happened-to-wildlife-when-chernobyl-drove-humans-out-it-thrived" target="_blank">aumento de población de animales salvajes en la zona de exclusión alrededor de la central, desde que no hay humanos</a></b>.<br />
Oir hablar de Chernobyl dos veces seguidas en tan poco tiempo es
perfectamente normal, por supuesto; pero si habéis leído el artículo de
Izagirre os habréis dado cuenta de que cita en él a Svetlana Alexievich,
galardonada con el premio Nobel de literatura este mismo jueves.<br />
El tema de los lobos nos ha recordado, por cierto, un vídeo precioso: <b><a href="https://youtu.be/ysa5OBhXz-Q" target="_blank"><i>How wolves change rivers</i></a></b><i>. </i>Pero volviendo a los Nobel, merece la pena mencionar un par de enlaces sobre la búsqueda de neutrinos:
</div>
<div style="margin-left: 40px; text-align: justify;">
<b><a href="http://noticias.lainformacion.com/ciencia-y-tecnologia/ciencias-general/a-la-busca-de-la-materia-oscura-en-el-tunel-de-canfranc_XRtaHJMT6WTZXeSuNNGSj3/" target="_blank">A la búsqueda de materia oscura en el túnel de Canfranc</a></b>, por Antonio Martínez Ron<br />
<b><a href="http://www.radiolab.org/story/elements/" target="_blank">Elements</a></b>, en Radiolab.<br />
<b><a href="http://www.futilitycloset.com/2014/04/02/night-crossing/" target="_blank"><i>Night crossing</i></a></b>, en Futility Closet</div>
<div style="text-align: justify;">
Incluso viene a cuento, aunque no tenga nada que ver con los neutrinos, enlazar este poema que hemos recordado:<b> <a href="https://youtu.be/N8HchXbZ_-w" target="_blank"><i>Resurrection</i></a></b>, por Dylan Garity.<br />
Lo que probablemente no tenga ya ningún sentido —además de ser probablemente ilegal— es dejaros también <b><a href="https://youtu.be/c2IqI7gOE54?t=1h10m24s" target="_blank">la opinión de Dara O'Briain sobre la película 2012</a></b>.</div>
Noéhttp://www.blogger.com/profile/01510460993976112884noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2389922737459113578.post-72165379826679060852016-03-04T10:21:00.001+01:002020-05-04T00:59:59.531+02:00Sobre "The Orchid Thief"<div style="text-align: justify;">
La periodista Susan Orlean leyó un breve en un periódico local de Florida sobre el juicio al responsable de un vivero, a quien habían detenido recolectando varias docenas de orquídeas protegidas del pantano Fakahatchee. La noticia le produjo curiosidad, no tanto por el caso en si, como porque los cómplices del ladrón pertenecían a la nación Seminola, y los indios tienen un estatus legal tan extraño en Estados Unidos que ni siquiera estaba claro que la ley que habían roto se les pudiese aplicar a ellos: era posible que el veredicto dictase que los Seminola no son ciudadanos americanos, sentando un precedente de magnitud imprevisible. Orlean decidió volar a Florida.<br />
El resultado del juicio, sin embargo, no fue particularmente interesante. No se trató a fondo el asunto de la ciudadanía, nadie fue a la cárcel, se estableció una prohibición de acceso al pantano, hubo algunos culpables de faltas administrativas, se pagaron algunas multas.<br />
Meses después, Orlean publicó<i> </i>un reportaje sobre el caso, "<b><a href="http://www.newyorker.com/magazine/1995/01/23/orchid-fever"><i>Orchid Fever</i></a></b>". El texto habla de obsesiones y de las desilusiones que las siguen, y se centra en el protagonista del robo, John Laroche, un tipo brillante y marginal que adquiere pasiones insanas, vuelca su vida en ellas de forma enfermiza, y las acaba abandonando bruscamente.<br />
Me da la sensación, aunque qué sé yo, de que Orlean le dedicó tan específicamente su texto a Laroche para salvar un reportaje que estaba en riesgo porque el veredicto del juicio había resultado ser irrelevante; pero, al hacerlo, se vio con un montón de detalles y curiosidades que había ido acumulando con paciencia de sub-sub-bibliotecaria mientras trabajaba en el reportaje, y que se habían quedado finalmente sin sitio en el texto.<br />
Tenía una lista de todos los robos de orquídeas que se habían producido en los últimos veinte años, y otra con las muertes de los recolectores de platas victorianos, y otra con los nombres y las formas de las orquídeas del Fakahatchee. Conocía estafas inmobiliarias, envidias, cuernos y diputas personales entre <i>orchid men;</i> contrabandistas, exploradores, o un jefe indio que dirigía un holding empresarial y había ganado un Grammy.<br />
Así que, a partir de una nota breve en un periódico regional, sobre un tema tan poco atractivo como la compra-venta de orquídeas en Florida, con un caso judicial que se
había desinflado mientras trabajaba en él, y después de haberle dedicado ya un texto de 6500 palabras, Susan Orlean decidió escribir un libro entero, como una nota al pie en la que poder estirar las piernas y explayarse. <br />
<blockquote class="tr_bq">
<i>The great Victorian-era orchid hunter William Arnold drowned on a
collecting expedition on the Orinoco River. The orchid hunter Schroeder,
a contemporary of Arnold's, fell to his death while hunting in Sierra
Leone. The hunter Falkenberg was also lost, while orchid hunting in
Panama. David Bowman died of dysentery in Bogotá. The hunter Klabock was
murdered in Mexico. Brown was killed in Madagascar. Endres was shot
dead in Rio Hacha. Gustavo Wallid died of fever in Ecuador. Digance was
gunned down by locals in Brazil. Osmers vanished without a trace in
Asia. The linguist and plant collector Augustus Margary survived
toothache, rheumatism, pleurisy, and dysentery while sailing the Yangtzé
only to be murdered when he completed his mission and traveled beyond
Bhamo.</i></blockquote>
"<i>The Orchid Thief</i>" es como un libro de Jacinto Antón o de Cunqueiro, como "<i>The thrilling adventures of Lovelace and Babbage</i>", de Sydney Padua, como las notas ficticias de "<i>Jonathan Strange & Mr. Norrell</i>" de Susanna Clarke: una celebración de la minuciosidad y de la curiosidad del chapón de clase.<br />
Está lleno de enumeraciones, como la de arriba, y aunque están escritas con ritmo y gracia, siempre hay más listas de las que uno anticipa, y cada una dura más de lo que se espera. En el párrafo anterior, Orlean cita a once exploradores, detallando cómo sucedieron sus muertes y dónde, y enumerando <span style="background-color: white; color: #222222; font-family: "arial" , sans-serif; font-size: x-small;">—</span>listas dentro de listas<span style="background-color: white; color: #222222; font-family: "arial" , sans-serif; font-size: x-small;">—</span> todas las enfermedades que había pasado Augustus Margary antes de ser asesinado más allá de Bhamo. Opino que, a partir del cuarto caso <span style="background-color: white; color: #222222; font-family: "arial" , sans-serif; font-size: x-small;">—</span>David Bowman, muerto de disentería en Bogotá<span style="background-color: white; color: #222222; font-family: "arial" , sans-serif; font-size: x-small;">—</span>, la lista ya no es necesaria para explicar el peligro que corrían: simplemente se está <a href="https://youtu.be/6GqMgLnluKY?t=4m28s">pegando un gustazo</a>.<br />
El libro es un pantano: una maravilla de la naturaleza, lleno de vida, espeso de historias escondidas en la maleza, con una sorpresa a la vuelta de cada hoja; se avanza palmo a palmo, hundiéndose a cada paso en un lodo espeso de datos y nombres, con un machete en la mano y una enorme sonrisa de felicidad. <br />
<blockquote class="tr_bq">
<i>Orchids have diverse and unflowerlike looks. One species looks
just like a German shepherd dog with its tongue sticking out. One
species looks like an onion. One looks like an octopus. One looks like a
human nose. One looks like the kind of fancy shoes that a king might
wear. One looks like Mickey Mouse. One looks like a monkey. One looks
dead. One was described in the 1845 Botanical Registry as looking like
"an old fashion head-dress peeping over one of those starched-high
collars such as ladies wore in the days of Queen Elisabeth, or through a
horse-collar decorated with gaudy ribbons". There are species that look
like butterflies, bats, ladies' handbags, bees, swarms of bees, female
wasps, clamshells, roots, camel hooves, squirrels, nuns dressed in their
wimples and drunken old men. The genus Dracula is blackish-red and
looks like a vampire bat. Polyrriza lindenii, the Fakahatchee's ghost
orchid, looks like a ghost but has also been described as looking like a
bandy-legged dancer, a white frog and a fairy. Many wild orchids in
Florida have common names based on their looks: crooked-spur, brown,
rigid, twisted, shiny-leaf, cow horn, lipped, snake, leafless beaked,
rat tail, mule-ear, shadow witch, water spider, false water spider, lady
tresses and false lady tresses. [...]</i></blockquote>
</div>
Noéhttp://www.blogger.com/profile/01510460993976112884noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2389922737459113578.post-8090803559623638102016-02-28T23:24:00.000+01:002017-11-12T23:48:05.553+01:00I wanna be your Maria Popova #2<div style="text-align: justify;">
En 2009, Evan Ratliff desapareció sin dejar rastro, y ofreció una recompensa a quien lo encontrase. <i><a href="https://evan.atavist.com/vanish" target="_blank"><b>Vanish</b></a></i>, por Evan Ratliff.<br />
Hablando de este tema, tres años después apareció un mensaje con un acertijo en 4chan. Fue el principio de <i>Cicada 3301</i>, sea lo que sea.
</div>
<div style="margin-left: 40px; text-align: justify;">
<b><a href="http://www.telegraph.co.uk/technology/internet/10468112/The-internet-mystery-that-has-the-world-baffled.html" target="_blank"><i>The internet mystery that has the world baffled</i></a></b><i>, </i>por Chris Bell.</div>
<div style="margin-left: 40px; text-align: justify;">
<i><b><a href="http://www.rollingstone.com/culture/features/cicada-solving-the-webs-deepest-mystery-20150115" target="_blank">Cicada: Solving the Web's deepest mystery</a></b>,</i> por David Kushner.</div>
<div style="text-align: justify;">
Muchos años antes, por cierto, cuando internet todavía no era internet,
Cliff Stoll descubrió a un ciberespía por un desfase de centavos de
dólar en su factura de teléfono, y después concedió una entrevista
gloriosa en C-SPAN. <b><a href="https://youtu.be/mGS8A-oGGVw" target="_blank"><i>Booknotes: Clifford Stoll</i></a></b>.<br />
Y ya que estamos dando vueltas por el vecindario, mencionemos también un par de episodios de dos podcasts, <i>for good measure</i>: <b><i><a href="http://www.radiolab.org/story/darkode/" target="_blank">Darkode</a></i></b>, en Radiolab, y <b><a href="http://www.npr.org/sections/money/2014/11/26/365510643/episode-585-chasing-the-dread-pirate-roberts" target="_blank"><i>Chasing the Dread Pirate Roberts</i></a></b>, en <i>Planet Money.</i><br />
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Pero volvamos atrás un momento. Merece la pena, si me dejáis irme por una tangente, mencionar la fenomenalmente obsoleta
web de Stoll, a través de la cual vende botellas de Klein: <b><a href="http://www.kleinbottle.com/" target="_blank"><i>Acme Klein Bottles.</i></a></b></div>
</div>
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En Numberphile podéis ver algunos vídeos en los que trisca y saltarica por su laboratorio promocionando sus botellas de Klein, pero también desmontando calculadoras Curta<span style="background-color: white; color: #666666; font-size: 7.5px;"><sup>(1)</sup></span>, o cortando cristal con una sierra improvisada con velcro y un imán. Sirva el siguiente como ejemplo, pero hay más: <b><a href="https://youtu.be/-k3mVnRlQLU" target="_blank"><i>The man with 1000 Klein bottles under his house</i></a>.</b><br />
No sé si me creo a Stoll, pero me encanta. Su entusiasmo me recuerda, por cierto, al protagonista de uno de mis episodios favoritos de <i>This American Life, <a href="http://www.thisamericanlife.org/radio-archives/episode/443/amusement-park" target="_blank"><b>Amusement Park</b></a>.</i></div>
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Para compensar el alboroto, dejadme terminar con vídeos de artesanos que construyen cosas con las manos, modesta y pacientemente.</div>
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<div style="margin-left: 40px; text-align: justify;">
<b><i><a href="https://vimeo.com/14985356" target="_blank">David A. Smith, sign artist</a></i>.</b></div>
<div style="margin-left: 40px; text-align: justify;">
<b><a href="https://vimeo.com/63511505" target="_blank"><i>Peter Bellerby, globemaker.</i></a></b><br />
<b><i><a href="https://youtu.be/KvSyQDu49pI">Jake Weidmann, master penman</a></i></b><span style="background-color: white; font-size: xx-small;"><sup>(2)</sup></span></div>
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<br />
<sup><span style="font-size: xx-small;">(1)</span></sup><span style="background-color: white; color: #666666;"><span style="font-size: xx-small;"> </span><span style="font-size: x-small;">Me acabo de acordar, releyendo esta entrada, de <b><a href="https://twitter.com/nramalleira/status/865324792437723137">este tweet</a> </b>mío, que surgió de un hilo precioso.</span></span><br />
<span style="background-color: white; color: #666666;"><span style="font-size: x-small;"><sup style="color: black;"><span style="font-size: xx-small;">(2)</span></sup><span style="color: #666666; font-size: small;"><span style="font-size: xx-small;"> </span><span style="font-size: x-small;">Creo que este buen hombre merece que lo incluya en esta lista: <a href="https://youtu.be/cQX75U5jy0E" style="font-style: italic; font-weight: bold;">Frank Howarth, carpenter</a>.</span></span></span></span></div>
Noéhttp://www.blogger.com/profile/01510460993976112884noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2389922737459113578.post-56017308698914430042016-02-22T14:22:00.003+01:002018-08-20T12:29:21.042+02:00I wanna be your Maria Popova #1<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: x-small;"><i>El año pasado empecé con mi amiga M. una newsletter de recomendaciones. Nació en cierta medida <a href="http://tiporaretto.blogspot.com.es/2015/01/resonancia.html">destinada al fracaso</a> y ha ido languideciendo hasta ahora, pobrecita, entre la indiferencia de los lectores y mi propia pereza al escribirla. La he cerrado. Voy a ir colgando aquí los boletines que enviamos.</i></span></div>
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<br /></div>
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Cuando le tiro una pelota para que la recoja, mi perro me devuelve un limón maduro que se ha encontrado en el prado, una manzana, u otra pelota de la que se había desentendido días antes.</div>
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Los siguientes enlaces han sido escogidos y agrupados con la mentalidad de mi perro Pachín: la forma de unos recuerda levemente a la de los otros, o pesan lo mismo, o huelen parecido.</div>
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Os los presento nervioso y moviendo la cola y esperando que os resulten lo suficientemente interesantes como para que sigáis jugando conmigo dentro de dos semanas.</div>
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<a href="http://thememorypalace.us/2011/01/six-scenes-in-the-life-of-william-james-sidis-wonderful-boy/"><i><b>Six scenes in the life of William James Sidis, wonderful boy</b></i></a> en <i>The Memory Palace</i>.</div>
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<a href="http://blog.longreads.com/2015/05/05/the-boy-who-loved-transit/"><i><b>The boy who loved transit</b></i></a>, por Jeff Tietz.</div>
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<a href="http://www.deezer.com/album/9280622"><i><b>The Race for Space</b></i></a>, por <i>Public Service Broadcasting.</i></div>
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<a href="http://songexploder.net/the-long-winters"><i><b>The Long Winters, "The Commander thinks aloud"</b></i></a>, en <i>Song Exploder.</i></div>
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<br /></div>
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<a href="http://www.si.com/vault/2008/12/08/105760296/2-on-5"><i><b>2 on 5</b></i></a>, por Thomas Lake.</div>
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<a href="http://www.si.com/vault/1991/02/18/123632/shadow-of-a-nation-the-crows-once-proud-warriors-now-seek-glory----but-often-find-tragedy----in-basketball"><b>Shadow of a Nation</b></a>, por Gary Smith.</div>
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Noéhttp://www.blogger.com/profile/01510460993976112884noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2389922737459113578.post-59376274056355600022016-02-09T02:27:00.000+01:002019-02-14T20:32:25.272+01:00Qué habrá sido de mi disco de Edgar Oliver<div style="text-align: justify;">
<i><span style="font-size: xx-small;">Texto publicado originalmente en gallego <a href="http://tipotimidetto.blogspot.com.es/2015/01/o-prado-dos-rastrillos-era-unha-festa.html"><b>aquí</b></a>, el 16/01/2015.</span></i><br />
<br />
A finales de octubre de 2014 encontré en Barcelona una habitación pequeña, interior y barata, en un piso de principios de siglo lleno de libros de segunda mano y goteras y discos de jazz y basura en las esquinas, a compartir con una cantante de tangos argentina y una mexicana muy simpática que trabajaba por las noches y bebía vino por las mañanas, con ventiladores estropeados y una lavadora vieja en el salón como mesita de la tele. El piso me encantó desde el momento en el que entré por la puerta. Parecía un sitio donde ser pobre y feliz, como un Vila-Matas en París.</div>
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Les dejé pagada una fianza y me fui a Galicia un par de semanas. El día que volví, antes de que pudiese dejar las cajas de la mudanza en la habitación, mis flamantes compañeras de piso me explicaron que en ese tiempo habían decidido volverse a sus respectivos países antes de final de año, y que me devolverían la fianza si quería irme y buscar piso en otra parte.<br />
Y posiblemente debería haberlo hecho, pero en un arrebato bohemio y optimista me imaginé bebiendo vino blanco barato en copas rotas y comiendo tamales con un sol de noviembre en la cara, mientras la argentina ensayaba "Nostalgia" en el salón, y decidí quedarme a disfrutar de la vida.<br />
Metí las cajas de la mudanza en mi cuarto y ni siquiera me preocupé de desempaquetarlas, porque me sentía decadente; encendí el ordenador, me conecté a la wifi del piso y celebré que ya había acabado la mudanza contribuyendo improvisadamente a la campaña de Indiegogo del disco nuevo de <a href="http://youtu.be/GNJWHwTUvwU">Edgar Oliver</a>, como un Ephrussi en canotier.<br />
Después cerré la puerta de la habitación y basicamente no salí en todo el mes, porque más allá de los arrebatos momentáneos soy tirando a gris, y no hay cantante de tangos que me haga cenar viendo el Intermedio.<br />
Tampoco fue todo tan pedestre como suena, <i>mind you</i>: cierto es que no bebí absenta ni vino blanco en copas rotas, pero las chicas querían vender todos sus muebles antes de marcharse, así que estuve dos semanas sin mesa en el salón, y cinco o seis días sin microondas, <a href="https://twitter.com/nramalleira/status/540623690736861185">comiendo pasta fría</a> sobre la lavadora vieja como un escritor en Ménilmontant.<br />
El doce de diciembre salí del piso sin haber comido ni un solo tamal, con las mismas cajas de cartón que un mes antes y dos detalles más, que recuperé de la basura por salvar algo del espíritu bohemio con el que me había mudado: una botella del mejor alcohol del piso, y uno de los libros de segunda mano.<br />
A falta de absenta la botella tuvo que ser de cava brut, que nunca me ha gustado; en cuanto al libro, una novelita de Ben Elton de cuando pretendía ser joven y provocador, tenía una pinta francamente atroz. Acabé bastante satisfecho.<br />
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</div>
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<br />
Me acordé de repente del disco ayer a las tres de la mañana, después de dos meses sin prestarle atención a la página de Kickstarter ni al par o tres de correos que me habían ido mandando. <br />
Resultó que la campaña se había financiado exitosamente. Tenía derecho a que me mandasen un email con una copia digital del disco y una postal antigua de Coney Island firmada por Edgar, que posiblemente ya estuviese de camino. La dirección que les había dado, en los días de vino y rosas, era la del piso de la cantante de tangos.</div>
<div style="text-align: justify;">
Cuando lo leí en la web de la campaña me entró un pánico de madrugada; traté de buscar la fecha del envío y, al no encontrar nada, les escribí con creciente nerviosismo un correo confuso y con párrafos densos como la <i>fraga </i>de Eirís <span style="background-color: white; color: #666666; font-family: "arial" , "tahoma" , "helvetica" , "freesans" , sans-serif; font-size: x-small;">—</span>donde todas las noches el lobo saluda a la gente<span style="background-color: white; color: #666666; font-family: "arial" , "tahoma" , "helvetica" , "freesans" , sans-serif; font-size: x-small;">—,</span> espesos como solo puede producir, con la combinación justa de sueño y nerviosismo, alguien que incluso en su mejor momento acaba hablando de absenta y lavadoras estropeadas cuando se había sentado inocentemente a escribir exclusivamente sobre una postal antigua; de alguna manera perdí el hilo a medio camino —os sorprenderá saber—, y se me olvidó mencionarles que me había mudado y que la dirección que ellos tenían no era la correcta.</div>
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Cuando me levanté hoy —a una hora, por cierto, francamente bohemia—, me esperaba en el buzón un email de la organizadora de la campaña. "Estimado Noé", me decía. "Sentimos mucho el retraso en el envío de su postal. Hoy mismo acabamos de reenviarla, y me alegra informarle de que hemos incluido adicionalmente una copia física del CD como muestra de buena voluntad".</div>
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Así que le he dado un disco de Edgar Oliver y una postal antigua de Coney Island a los nuevos inquilinos del piso, como regalo de bienvenida. Ya pueden merecerlo. Ya pueden ser escultores, o nobles austríacos venidos a menos. </div>
Noéhttp://www.blogger.com/profile/01510460993976112884noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2389922737459113578.post-17081007188621464172015-12-30T15:22:00.000+01:002016-05-24T16:23:29.489+02:00Como una moneda rodando cuesta abajo<div style="text-align: justify;">
Me desperté a las 8:30 —espantosamente tarde si pretendía llegar al trabajo a las nueve—, y la mañana ha seguido a partir de ahí como una carrilana rodando hacia el puerto en una carrera de las fiestas patronales de un pueblo pintoresco en agosto.<br />
He decidido no desayunar y he valorado no ducharme, si he de ser sincero, pero al final por lavar la conciencia me he dado una ducha rápidísima de la que salí resbalando cuesta abajo y sin frenos por el pasillo a las 8:41.<br />
A las 8:43 agarré unos pantalones con la mano que saqué por el cuello del polo mientras me colocaba un calcetín; al ponerlos caí en la cuenta de que tenían un agujero en el bolsillo, pero eran de repente las 8:48 y no tenía tiempo de cambiarlos.<br />
Salí corriendo de la habitación a las 8:50, y volví a entrar diez segundos después porque me había dejado las llaves de casa, las del coche, la cartera, el reloj, el zapato izquierdo y las gafas.<br />
Me lo metí todo apresuradamente en el bolsillo del pantalón, y también los cascos, que estaban enganchados al móvil y quedaron colgando por fuera. Iba a meter también el monedero, pero como eran demasiados bultos pensé que sería mejor vaciar directamente las monedas en el bolsillo, para que ocupasen menos.<br />
El caso es que todas esas decisiones (poner el despertador, desayunar o no, ducharme...) son tan pequeñas que ni siquiera tengo el recuerdo de haberlas tomado; como esa lluvia fina que parece no estar cayéndote encima pero te acaba mojando igualmente.<br />
Las cosas me fueron pasando por el sueño y la vagancia y la falta de tiempo, y yo mal que bien seguí corriendo hasta las 8:51, cuando un chaparrón de monedas de cinco y diez céntimos se coló por el agujero del bolsillo de mi pantalón y se me escurrió por la pierna, sin que hubiera ningún momento clave en el que todo se hubiese ido al traste, ninguna decisión consciente a la que echarle la culpa.<br />
Acabé entrando en el trabajo pasadas las nueve y cuarto, atribulado y cojo como Ahab, pisando sobre dos euros y pico en moneda pequeña que llevaba metidos en el zapato y haciéndome preguntas muy serias sobre el sentido de mi vida.</div>
<br />Noéhttp://www.blogger.com/profile/01510460993976112884noreply@blogger.com0